A estas horas, aún dura algo de la resaca del España - Rusia de la Eurocopa de fútbol, que, como ya sabe todo quisqui, acabó con un palizón de España sin contemplaciones por 4:1. El año pasado hubo dos enfrentamientos deportivos destacados entre España y Rusia, curiosamente el mismo día, en sendas finales de Campeonatos de Europa y, no menos curiosamente, con resultados contrapuestos.
En el Eurobasket, celebrado en Madrid, la selección española de baloncesto, que era la favorita, tanto por jugar en casa como por ser la campeona del mundo en ejercicio, perdió por un punto ante la rusa, tras dos acciones finales de infarto; sin embargo, en Moscú, ese mismo día, tenía lugar la final del campeonato de Europa de balonvolea, y allí la selección española derrotaba a la favorita, Rusia, en cinco sets, con un final igualmente de infarto.
Pero eso, por desgracia, son deportes relativamente minoritarios. El deporte que manda, mal que nos pese a los locos por el basket, es el fútbol, y aquí hay que decir que emoción, lo que es emoción, hubo poca. Los rusos son muy malos. Tanto, que incluso la selección española les ha dado p'al pelo. Aún así, vamos a ver cómo sobrevive un español a un partido como ése en territorio comanche.
Lo fuimos a ver unos cuantos a casa de Boots, que dispone de los medios técnicos adecuados para ello. Los de TVE se pusieron a grabar a unos cuantos chicos que lo vieron desde uno de los restaurantes españoles de Moscú, El Parador (ya hablaré otro día de ese restaurante y de su mediocre tortilla de patatas), donde estaban claramente en minoría. No es que su integridad física corriera peligro, porque la mayoría de los rusos (en particular si están sobrios... bueno, la verdad es que dejan de estarlo a medida que avanza el partido) se toman estas cosas con filosofía y saben que su selección es una amalgama de perdedores, con lo que lo normal es, evidentemente, que pierdan. De hecho, se clasificaron después de que Inglaterra la pifiara (ya sabéis que se llevan mal con los ingleses), aunque ellos sólo fueron capaces de ganar a Andorra por 1:0, que ya dice algo de cómo juegan estos chicos.
Pero este año se habían hecho ilusiones. Primero, el Zenit gana la copa de la UEFA al Bayern de Múnich, cosa que nos alegró mucho a los que detestamos al Bayern de Múnich; segundo, se clasifican a algo decente por primera vez en bastante tiempo; tercero, hacen como la prensa española: ¡Somos los mejores! Hay que reconocer que, así como la prensa española deportiva no se conforma con menos del Campeonato, la rusa asegura que Rusia se clasificará para semifinales. Algo más de modestia, pues, sí que hay.
Durante el partido, las calles de Moscú estaban relativamente vacías, pero no tanto como seguramente estarían las de cualquier ciudad española. Cuando acabó el partido y los últimos salimos de casa de Boots, el portero de la finca, muy amable, nos felicitó por la victoria sin refunfuñar ni nada.
El ruso no exterioriza sus sentimientos así como así, y está dispuesto a despotricar contra sus futbolistas, pero la procesión va por dentro. Al día siguiente, yendo al trabajo, pude comprobar que la gente estaba por la calle especialmente tensa, tocaba el claxon por cualquier cosa y llevaba una carita que no hacía presagiar que era el último día de trabajo antes de cuatro días de fiesta (sí, hoy es fiesta; de hecho, debo ser de los pocos que está currando). Incluso tuve mis más y mis menos con el conductor de un camioncito de transporte de dinero evidentemente amargado, pero me libré apartándome y dejando que se peleara con el conductor del 4x4 que venía detrás de mí, que también estaba amargado y que empezó a tocar el claxon todo lo fuerte que quiso. Ay, qué angelitos.
Y luego la prensa rusa. Me pareció mucho más indulgente que la española con los fracasos propios. Cuando la selección española pierde un partido, que se prepare, porque les llueve de todo; sin embargo, en la prensa rusa todo eran frases como "no hubo tanta superioridad", "ahora sólo hay que ganar a Grecia y Suecia, lo cual entra dentro de lo posible", "el experimento de Hiddink en la defensa no funcionó, pero el ataque no estuvo nada mal", "si hubiera entrado el tiro al poste", "Villa, en el segundo gol, estaba cerca del fuera de juego", (Curiosamente, nadie dice nada del cuarto gol (que sí fue en fuera de juego), mientras que el segundo es totalmente legal), "no tuvimos suerte", "no hubo tanta diferencia técnica en el juego"...
Lo que sí es exactamente igual que en España son las frases perogrullescas después de los partidos. Me quedo, de entre todas las posibles, con la de Víktor Onopko: "Nos faltó meter tres goles." La has clavao, macho.
Conflicto Rusia-Ucrania. Actualización mes de octubre
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investigaciones de opinión pública no son confiables porque mucha gente
teme re...
Hace 2 semanas
4 comentarios:
Vaya que la ha clavado el camarada Onopko! La verdad es que no entiendo nada de futbol -ni me gusta-, aunque espero que haber comenzado bien, aunque sólo sea esta vez, sea el presagio de un final feliz.
Oye pues razón tenía el hombre, jajajaja... Bueno, acaba de terminar el partido Suecia-España, con resultado 1-2, a favor de "los nuestros", así que ¡¡¡A celebrarlooooooo!!!!
Besitosssss
César, normalmente se comienza bien. Entonces todo el mundo dice que España va a ser campeona seguro, se comienzan a voltear las campanas, a entrevistar a los jugadores, a ponerles de héroes nacionales para arriba y a comparar los partidos que están jugando con Lepanto y la toma de Breda. Y, luego, normalmente en cuartos de final, cuando ya no hay liga, sino que aquí ya sólo pasa uno, a casa. Y resulta que no eran tan buenos, sino pésimos.
La diferencia con Rusia es que éstos llegan por primera vez en mucho tiempo a la fase final. E incluso podrían pasar la fase de grupos, después de ganar a Grecia.
Esther, ¿lo ves? Eres un ejemplo práctico de lo que acabo de escribir.
Jajaja, no creas Alfito, sé que la euforia les va a durar poco... Pero alegra ver que la selección gana, no te lo voy a negar. En los informativos ya van preparando de todos modos a la peña con cosas del tipo "los 22 de junio que la selección ha jugado, la cosa ha ido mal, a ver si este año superan el mal fario" juas, claro, van a perder por jugar el 22 de junio, que te conste que va a ser por eso, no porque ellos jueguen mal o porque el rival sea mejor, si no por la fecha. Si ya sabía yo que en esto del fútbol, lo de menos, eran los jugadores...
Besitos
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