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lunes, 21 de octubre de 2013

Turkmenistán de primera mano

- Entonce, Irina, ¿usted es turkmena?

- Sí, sí.

- ¿Y de dónde? ¿De Asjabad?

- De Asjabad, sí.

- ¿Y qué tal por allí?

- Ah, muy bien. Todo va perfectamente ¿Conoce usted Turkmenistán?

- Ya me gustaría, ya, pero nunca he tenido ocasión de ir. Lo que sí he tenido son ganas, pero creo que son ustedes bastante estrictos con los visados, así que no es fácil entrar.

- Eso es verdad, sí. Mi madre vive en Rusia, y la última vez no le dieron visado para entrar. Y no crea, que antes también había visado para salir, y no era fácil, no. Yo misma, es de las primeras veces que salgo a Rusia.

- ¿Y por qué lo hacen? ¿No quieren que la gente entre en su país?

- Nuestro país está muy bien, y por lo visto nuestros dirigentes piensan que, si dejan pasar a todo el mundo, mucha gente vendría a Turkmenistán a quedarse.

- Claro, claro... y eso no puede ser.

Yo me quedé mirándola por si lo decía en serio o iba con choteo, y la verdad es que no me quedó claro del todo.

- Por cierto, que tengo otra cuestión - dije.

- Diga.

- ¿Para cuándo podemos esperar una edición del Rujnama en español? La última vez que lo investigué, no había ninguna, y lo tuve que leer en ruso.

- Sí que es verdad que no la hay en español.

- ¿Y por qué no?

- Pues verá, yo creo que es poco probable que se vaya a traducir próximamente, porque quizá sepa usted que el autor murió.

- Lo sé. Saparmurad Turkmenbashí, el padre de los turkmenos.

- Bueno, pues las traducciones del Rujnama, muchas veces, eran regalos de personalidades extranjeras que venían a Turkmenistán a visitarle. Claro, a partir de que muriera, ya no ha habido más regalos, ni más traducciones. En todo el tiempo que gobernó el Turkmenbashí, no hubo nadie que le regalara una traducción del Rujnama al español, y por eso ese libro no existe en su lengua.

- Ya veo ¿Y nadie se plantea traducirlo? El español, al fin y al cabo, es una de las grandes lenguas de la humanidad.

- Claro, claro, pero, después de todo, el Rujnama es un libro en primer lugar para turkmenos. No creo que sea interesante para hispanohablantes.

- Creo que no conoce usted bastante el público hispanohablante. Yo estoy convencido de que la gran mayoría quiere ir al paraíso, y sé perfectamente que la forma más sencilla para ello consiste en leer tres veces el Rujnama, como el Turkmenbashí pidió a Alá. El turkmeno es un idioma poco conocido, y por eso convendría traducirlo al castellano. Oiga, que somos quinientos millones, y subiendo.

Irina no pareció muy convencida. Para mí que no era muy creyente.

La conversación siguió por otros derroteros, Irina me pasó un billete de un sum, que es la moneda de por allí, y yo le pasé uno de diez rublos, que, visto que no había abierta una mísera tienda, de todas maneras no tenía ninguna posibilidad de gastar. Acabó en esto la comida, y tocaba continuar con el congreso, así que salimos a la calle para ir al hotel. Y, enfrente de mí, otra tienda por abrir.


Yo, la verdad, no sé qué van a vender aquí, porque no lo pone, pero parece interesante.

viernes, 18 de mayo de 2012

Todos somos turkmenos

Por mucho que el desenlace de la manifa del otro día esté en el horno todavía, en esta bitácora estamos especialmente atentos a las noticias que llegan desde Turkmenistán, que tienen preferencia absoluta sobre cualquier otra cosa, tanto más cuanto que lo bueno de los artículos sobre Turkmenistán es que, en la práctica totalidad de los casos, se comentan solos. El que desee leer el original lo tiene aquí.

Un académico turkmeno ha demostrado el origen asiático de los aztecas y de los vikingos.

El miembro de la Academia de Ciencias de Turkmenistán Odek Odekov ha llegado a la conclusión de que que muchos pueblos proceden de los antiguos turkmenos. Según la agencia "Ferganá", ha escrito sobre este asunto en los libros "Somos asiáticos, arios, turkmenos" y "Huellas de los turkmenos en la Tierra". Los libros son un compendio de los artículos escritos por el autor a lo largo de los años de independencia de Turkmenistán. Según indica la agencia, no han salido a la venta por una razón desconocida. El autor se los deja a sus conocidos para que los lean, pero exige que luego se los devuelvan.

Odekov afirma que los turkmenos, en particular, son antecesores de los chinos (ello lo argumenta con el hecho de que en chino hay "signos que, sin gran transformación, expresan la palabra "turkmeno").

Igualmente insiste en que el etnónimo "turk" es una transformación de la raíz "teke". "Teke" es la denominación de una de las tribus turkmenas. Odekov, haciendo notar que desde un punto de vista etimológico la palabra está asociada con el significado "carnero", indica que los símbolos de este animal (o sus cuernos) desempeñan un papel importante en casi todas las culturas antiguas. En opinión del científico, ello es una prueba más de que las civilizaciones mundiales proceden de los antiguos turkmenos.

El académico Odekov también considera que Zaratustra era turkmeno (más concretamente, procedente del Turkmenistán Meridional), y que el zoroastrismo surgió en la antigua ciudad turmena de Nise. El autor de la investigación incluso traza paralelismos entre Zaratustra y el antiguo presidente de Turkmenia Saparmurat Niyazov, autor del "Rujnama" (un tratado histórico filosófico declarado en la República libro sagrado de lectura obligatoria). "Veinticinco largos siglos después de Zaratustra", constata el académico, "en la sagrada tierra de Turkmenistán nació Saparmurat Turkmenbashi, el Grande, creador de la constitución espiritual de la antigua etnia turkmena, el "Rujnama", que se difunde triunfalmente por los países y continentes de la Tierra."

Odekov también utiliza las investigaciones sobre Zaratustra para apuntar el origen turkmeno de los escandinavos (aclara que Zaratustra y el dios escandinavo Odín son la misma persona). "En la etnogénesis de los pueblos escandinavos y en el surgimiento de sus estados (Islandia, Noruega, Suecia, Dinamarca) jugaron un papel importante nuestros antecesores turkmenos, los ogusios", concluye el investigador.

Entre otros descendientes de los antiguos turkmenos, este miembro de la Academia de Ciencias ha descubierto a los aztecas y los sumerios. En este último caso, el científico indica la conexión entre la palabra "sumerio" y la denominación de la tribu turcoasiática de los "savires". Por añadidura, la palabra "sumer", tal y como indica Odekov, coincide en su sonido con las palabras turkmenas "sum" y "er", que significan, respectivamente, "lugar nefasto" y "tierra".

Hay que recordar que anteriormente el presidente de Turkmenistán Gurbanguly Berdymujamedov había encargado a los científicos que revisaran el pasado de los turkmenos y prestaran especial atención a la "justificación científica de la teoría del origen del pueblo turkmeno". Con su antecesor Saparmurat Niyazov se consideró oficial la teoría histórica contenida en su "Rajnama". Ahí se afirma, entre otras cosas, que los turkmenos fueron los primeros en fundir minerales y que construyeron el primer carro, con lo que "la rueda turkmena giró el curso de la Historia."

miércoles, 11 de abril de 2012

Deportistas

El emperador Nerón era, por lo visto, aficionado a las carreras de carros. En el año 67 participó en los Juegos Olímpicos, en su modalidad favorita, en la que competían carros tirados por cuatro caballos. Para asegurarse la victoria, Nerón compitió en un carro tirado por diez caballos. Debía tener un mecánico mejor que los de Red Bull. Los otros participantes, evidentemente, no tenían acceso a los equipos técnicos de Nerón, y además eran unos envidiosos que se retiraron indignados, con los cual Nerón corrió solo y, claro, ganó, aunque estuvo a punto de no hacerlo porque se cayó dos veces del carro. P'haberse matao.

Las cosas no han cambiado demasiado en estos dos últimos milenios. Lo demuestra el presidente de Turkmenistan, Gurbanguly Berdymujamedov (sí, todo eso), gran aficionado a las carreras de coches. Leamos la noticia, cuyo original está aquí.

El presidente de Turkmenistán, Gurbanguly Berdymujamedov, elegido en febrero para un segundo mandato, demostró que sabe vencer no sólo en el terreno político, sino también en el deportivo.

El sábado llegó al circuito de carreras de Asjabad en un lujoso deportivo Bugatti Veyron, para saludar a los aficionados a las carreras de coches que se habían reunido para ver la competición. Inesperadamente para todos, tomó parte en la carrera, obteniendo una convincente victoria sobre sus oponentes, según informa ITAR-TASS.

Durante la inauguración, Berdymujamedov preguntó al presentador de la ceremonia: "¿Puedo participar yo también?" Al recibir una respuesta afirmativa, el presidente se puso al volante de un poderoso coche Volkicar de fabricación turca y tomó la salida a la señal de los jueces. Berdymujamedov superó a sus contrincantes, al obtener el mejor tiempo del circuito.

Los organizadores de la competición decidir entregar el coche en el que compitió el presidente al museo nacional del deporte.


Como dicen bastantes comentaristas rusos, éste al menos no ha encontrado casualmente ninguna ánfora del siglo VI en el Mar Negro, como hacen otros.

¿Y en España no pasan estas cosas? ¡Claro que no!, diremos vehementemente.

Bueno, bueno, no estemos tan seguros... algún caso conozco y puede que escriba sobre él.

domingo, 18 de febrero de 2007

Las elecciones del elegido

Hoy, esto va a ser una entrada larga, pero no tiene desperdicio (quizá porque no es mía). Lo he traducido de la prensa rusa de hace unos días, y hace referencia a la sucesión del nunca suficientemente recordado Turkmenbashi. El periodista, como buena parte de quien opina sobre Turkmenistán, tiene una retranca absolutamente deliciosa para mi gusto.

(KOMMERSANT, SÁBADO, 10 DE FEBRERO)

LAS ELECCIONES DEL ELEGIDO

Turkmenistán vota a su segundo presidente sin personas ajenas

Mañana en Turkmenistán, por primera vez en toda la historia del país independiente, tendrán lugar elecciones presidenciales con alternativas (las elecciones ya han tenido lugar, entretanto). Las autoridades locales han afrontado este acontecimiento concienzudamente. Para protegerse de cualquier infracción durante la campaña electoral, Turkmenistán cerró las fronteras con antelación, dejó de conceder visados de entrada a los extranjeros y no abrió mesas electorales en sus embajadas en el extranjero. Y para evitar sorpersas desagradables el día de la votación, el presidente de la Comisión Electoral Central de Turkmenistán, Murad Karryev, proclamó con antelación vencedor de las elecciones al presidente en funciones Gurbanguly Berdymujammedov.

Democratización

"Como conocéis por las comunicaciones diarias transmitidas por televisión, radio y otros medios de información, estoy ocupado exclusivamente con cuestiones de importancia nacional. En consecuencia, estoy dispuesto a conceder más oportunidades a los otros cinco candidatos, para que puedan mantener más encuentros con su electorado". Estas palabras del principal favorito en las próximas elecciones presienciales en Turkmenistán, Gurbanguly Berdymujammedov, han sido citadas por todos los medios de información turkmenos durante toda la campaña electoral. Con esto, el sucesor del difunto Turkmenbashi alteró algo a las personas más cercanas a él. El órgano supremo ejecutivo de la república, el Jalk Masjalaty (Consejo Popular), lo nombró el 26 de diciembre por unanimidad jefe de la comisión encargada de organizar los funerales del fallecido Padre de Todos los Turkmenos y candidato a presidente, cinco días después de la muerte de Saparmurad Niyazov. Es más, los delegados querían nombrarlo presidente inmediatamente . Pero él se resistió, e incluso insistió en que le escogieran cinco contrincantes. Revelando sus pensamientos, el presidente de la Comisión Electoral Central, Murad Karryev, confesó honestamente que, personalmente, consideraba que el mejor candidato a presidente era Gurbanguly Berdymujammedov.

A continuación, el presidente en funciones sorpendió más de una vez a Turkmenistán con sus osadas iniciativas.

Por ejemplo, durante la campaña electoral, Gurbanguly Berdymujammedov, glorificado por periódicos y cadenas de televisón como fiel seguidor del camino del Gran Turkmenbashi, prometió derogar las reformar más tremendas de su antecesor. Así, se comprometió a reimplantar la enseñanza media obligatoria de diez años, eliminada por decreto de Saparmurad Niyázov, que consideraba que para educar a los turkmenos era suficiente con nueve años. Como persona con educación médica (el señor Berdymujammedov es estomatólogo, y en vida del Turkmenbashi encabezó el Ministerio de Sanidad), se comprometió a reformar la sanidad, volviendo a crear una red de instituciones sanitarias por todo el país; Saparmurad Niyázov consideraba que sólo hacían falta hospitales en la capital y en las capitales de distrito, mientras que en los pueblos la atención médica podían dispensarla los enfermeros militares. Finalmente, el señor Berdymujammedov también prometió devolver a los campesinos sus pensiones, elimimadas por el señor Niyázov hace dos años. Y ya fue una libertad inaudita la promesa del presidente en funciones de dar a la población acceso libre a internet y garantizar cobertura de móvil a los habitates rurales. Por fin, Gurbanguly Berdymujammedov, en una de las sesiones del Gobierno, declaró que Turkmenistán seguirá un camino democrático y se pronunció por el desarrollo de un sistema multipartidista.

Una de las primeras transformaciones introducidas por el presidente en funciones afectó a la libertad de prensa: permitió las emisiones en el país del primer canal ruso, si bien la emisión no es en directo, sino sólo después de su visionado previo por los servicios secretos y por el canal local "Miras". Por cierto que esta reforma, probablemente, está motivada por el hecho de que tras la muerte de Saparmurad Niyázov las cadenas de televisión turkmenas se quedaron sin nada con que llenar las parrillas de emisión. Antes, las cadenas de televisión pasaban todo el día vídeos glorificando al presidente vitalicio y deseándole largos años de vida. Ahora estas obras no son de actualidad, y todavía no se han rodado otras nuevas que las sustituyan.

Pluralismo

Los cinco candidatos restantes intentaron también, con todas sus fuerzas, mostrar a los electores que no eran peores que Gurbanguly Berdymujammedov. Y el presidente de la Comisión Electoral Central Murad Karryev, recordando la orden del presidente en funciones, les ayudó en esto como pudo. Los contrincantes del señor Berdymujammedov viajaron concienzudamente por las regiones, tal y como se les había indicado, tuvieron mítines con los electores, y presentaron disciplinadamente sus programas electorales.

Los medios de comunicación turkmenos ilustraron la actividad de los candidatos. "En el abarrotado salón de actos del Instituto Politécnico se reunieron los representantes de los colectivos de trabajadores de la industria petrolífera, de la sociedad civil, los ancianos honorables, profesores y estudiantes de los centros superiores de enseñanza de la capital. Se encontraban asimismo allí los representantes de la OSCE, venidos a Turkmenistán a invitación del Gobierno", más o menos así empezaban sus reportajes sobre los mítines de los candidatos los periodistas de "Neytral'ny Turkmenistán" (Turkmenistán Neutral), fundado por el difunto presidente Niyázov.

Cada uno de los contrincantes del señor Berdymujammedov intentó acercarse a los corazones de los electores. El candidato Ishanguly Nuryyev, viceministro de Petróleo y Minas, prometía "hacer crecer el potencial económico del país", "garantizar un aumento constante del bienestar del pueblo" y "solucionar de manera coordinada los problemas cotidianos de índole social". Otro pretendiente, el vicegobernador del velayato de Dashoguzsky, Amanyaz Atalykov, aseguraba que "se ocuparía de la educación moral y patriótica de los niños, de que la juventud recibiera una buena educación" y "de que los jóvenes tengan una buena salud física y sean capaces de cumplir con ímpetu su deber frente a la patria y al pueblo". Y el alcalde la ciudad de Turkmenbashi Ashirnyaz Pomanov prometió "mejorar la vida de lo campesinos y crear las condiciones necesarias para que el trabajo en la agricultura sea más productivo".

Los futuros electores también mostraron iniciativas durante los mítines e incluso se atrevieron a preguntar a los candidatos cómo se resolvería el problema de la drogadicción y del paro entre los jóvenes, si se "perfeccionaría la actividad de los medios de comunicación" o si se reforzaría "el principio crítico de la prensa".

No era extraño que a los mítines con los candidatos en distintas regiones asistieran las mismas personas. "Nuestras fuentes en Turkmenistán cuentan que con los candidatos iba por las regiones un autobús con activistas, que formulaban preguntas preparadas y creaban una apariencia de debate", dijo a "Ъ" Tadzhigul Begmedova, presidenta del Fondo Turkmeno de Helsinki, activo en Bulgaria. "Las autoridades intentaron ponerlo todo para que fuera como de acuerdo con las reglas ¡Les quedó de risa! Los candidatos tienen las mismas fotografías en las candidaturas y poco menos que los mismos trajes. Incluso hicieron campaña en los mismos sitios."

A todo esto, en la última semana anterior a las elecciones se acabó el pluralismo. Todos los candidatos, excepto el señor Berdymujammedov, desaparecieron inesperadamente de las pantallas de los televisores y de las emisoras de radio. Hasta el último día, en todos los programas de noticias imperó sólo el presidente en funciones, ya fuera teniendo reuniones con el consejo de ministros, o bien durante una inspección a una región más del país.

Aislamiento

Tras la muerte de Saparmurad Niyázov, las autoridades turkmenas adoptaron medidas de seguridad sin precedentes. Durante la campaña electoral aislaron totalmente del mundo exterior al país, ya de por sí cerrado. "Las fronteras aún están más cerradas que bajo Niyázov,", declaró a "B" Tadzhigul Begmedova. "Es difícil incluso pasar de una región a otra. El control es muy fuerte. La gente ha entendido que, hasta las elecciones, es mejor que se queden en casa." A la activista pro-derechos la secunda también el ex-ministro de Asuntos Exteriores de Turkmenistán Avdy Kuliev, que desde Noruega realiza actividades opositoras: "Todos pasan por un filtro. El régimen de seguridad fronterizo ha sido reforzado hasta tal punto que una mosca no pasaría ni hacia allí, ni desde allí." Especialmente fuerte, en palabras del señor Kuliev, es la seguridad en la frontera con Afganistán. "A través de Afganistán, planeábamos llevar alimentos a Turkmenistán, pues ahora escasea allí la harina. Pero cuando esto se supo en Ashjabad, trasladaron fuerzas suplementarias a la región de Mariy, junto a la frontera afgana. Así es como se protegen a sí mismos", cuenta el opositor.

Ayer, en la embajada de Turkenistán en Moscú, al corresponsal de "Ъ" le comunicaron una nueva medida precautoria más. El día de las elecciones no se abrirán mesas electorales en las misiones diplomáticas turkmenas. De esta manera, los ciudadanos de Turkmenistán que se encuentren fuera del país no tendrán que torturarse con la necesidad de elegir. A la pregunta de "Ъ" de qué había motivado tal decisión, el funcionario del servicio de prensa de la embajada respondió brevemente: "Así lo ha dispuesto nuestra Comisión Electoral Central."

Por otra parte, tal y como está convencido el señor Kuliev, no abren mesas electorales por pereza: "Para las autoridades esto son dolores de cabeza inútiles. Desde el principio ya decían que no hacían falta ni elecciones. Pero después, así y todo, decidieron celebrarlas."

La ONU y la OSCE decidieron no enviar a Turkmenistán a sus observadores. La Oficina de Institutos Democráticos y Derechos Humanos de la OSCE declaró que no había tiempo para formar una misión completa, por lo que a Ashjabad ya viajó un grupo de expertos poco numeroso, el cual recogerá información y se irá. No se prevé publicar informe final alguno.

A todo esto, a la toma de posesión de Gurbanguly Berdymujammedov, prevista para el 14 de febrero, ya están invitados los representantes de los estados extranjeros. Allí volverá a representar a Rusia el primer ministro Mijaíl Fradkov, que el año pasado ya voló allí a enterrar al Turkmenbashi. En esta ocasión incluso le han permitido al primer ministro ruso llevar consigo un grupo de periodistas. Vladimir Putin, de momento, prefirió no conocer en persona al nuevo amo de Turkmenistán; su única conversación telefónica tuvo lugar el 30 de diciembre, cuando el líder ruso expresó sus condolencias con motivo del fallecimiento del Padre de Todos los Turkmenos. Su próxima conversación, al parecer, ya tendrá lugar el lunes.

Vladimir Soloviov

(Entretanto, ya tuvieron lugar las elecciones. Ganó el favorito, Gurbanguly Berdymujammedov, con algo más de un 90% de los votos, lejos de las marcas del Turkmenbashi, que superaba fácilmente el 95%. Y es que Turkmenbashi era insuperable, pero, aún así, creo que este país seguirá dando mucha cancha, para desgracia de sus habitantes, que, como dijo alguien, no yo: "Cuando hay cosecha, comen; y, cuando no, tiran de latas")

jueves, 21 de diciembre de 2006

Que en paz descanse

Carbuncho se levantó y me dijo.

- Ha ocurrido algo tremendo. Lo peor que podía ocurrir.
- ¿Todavía no ha llegado el boletín del Banco de Rusia?
- Peor.
- ¿Qué puede ser peor?
- Ha muerto el Turkmenbashí.
- ¿Quéeeeee?

Sí, señores. El Turkmenbashí, padre de todos los turkmenos, presidente vitalicio de Turkmenistán, literato de éxito y hazmerreír de quienes seguíamos sus actuaciones, ha muerto. De forma natural, de repente, y de un paro cardíaco, en su cama. El sueño de ir a su capital, Ashjabad, y ver cómo eran las cosas por allí, se ha desvanecido para siempre, porque difícilmente aquello será lo mismo. Que Dios lo tenga en Su gloria, que todo podría ser.

Su verdadero nombre era Saparmurad Niyázov y era el amo de Turkmenistán desde 1985, cuando el país todavía formaba parte de la URSS. Es difícil, supongo, saber cuándo perdió completamente la chaveta y empezó la orgía de estatuas suyas (alguna de oro) por todos los rincones del país, de carteles por todas las esquinas, de cambios de nombre de ciudades... y de decisiones curiosas; cuándo se decidió a escribir el Rukhname, libro que debe guiar las vidas de todos los turkmenos, mientras casi todo el mundo pensaba que los tiempos de redactar biblias habían pasado. Voy a traducir algunas frases suyas.

Hubo un atentado contra su vida, o eso dicen. Niyázov apareció en la televisión turkmena y dijo: "Hubo juicios. 46 personas han sido condenadas. Hay otros cinco o diez autores, pero ahora no vamos a buscarlos." Y se fue. El principal acusado fue un ex-ministro de Asuntos Exteriores, que se confesó culpable, dicen que después de haber sido convenientemente "convencido", y que fue encerrado a cal y canto. Ni su familia es capaz de decir si está vivo o no.

En otra ocasión, le preguntaron qué le parecía que su retrato estuviera por todos los sitios. "A mí no me parece bien verme por todos los sitios, pero es que el pueblo lo pide." Todo un demócrata.

Con el tiempo, estos rasgos de su carácter se acentuaron. Los podridos medios foráneos aventuraron una ola de arrestos en Turkmenistán, está vez porque su pueblo quería demasiado a su líder. El día de la fiesta nacional (aniversario de la elección de Niyázov como presidente vitalicio), sucedió un escándalo mayúsculo: el Turkmenbashí no fue a la inaguración de una estatua suya ni a un concierto en su honor. Sus palabras fueron: "No vengáis con que no voy a los conciertos. Si en los conciertos futuros se va a hablar menos de mí, entonces iré ¡Todo el concierto lo han dedicado en mi honor! Me es incómodo estar ahí sentado. Estoy ahí, mirando al suelo, me ruborizo, palidezco. Es muy difícil. Puede que a alguien le guste la gloria, la alabanza, pero a mí no me gustan." El Turkmenbashí se quedó en casa, pues, para no pasar vergüenza, y declaró que vio el concierto por la tele. Más tarde fue más allá y pidió a sus funcionarios que pensaran bien cuál era su papel en la historia: "Os vuelvo a repetir que no hay que relacionar todo lo que pasa con el nombre de una sola persona. Se elige una persona, y bueno, sí que tiene una importancia capital. Pero si no hay pueblo, esa persona no puede hacerlo todo. Yo sólo dirijo, y el pueblo turkmeno trabaja, se reúne, construye. Por eso os pido que no me alabéis tanto. Ya no puedo ni ir a conferencias ni conciertos. Es incómodo estar ahí y oír como cantan alabanzas sobre ti." Pobret.

El fracaso de la delegación turkmena en los últimos juegos olímpicos (ni una triste medalla, ni siquiera una final...) obligó al Turkmenbashí a destituir al presidente del Comité Olímpico Turkmeno y a reemplazarlo por la persona más capacitada para el cargo que pudo encontrar: él mismo. Su prematura muerte (tenía 67 años) acaso nos prive de ver a los deportistas turkmenos arrasar en las próximas olimpiadas, como de otro modo hubiera sucedido sin la menor duda.

Finalmente, se decidió a escribir todo lo que sabía, y eso fue el origen del Rukhname, el libro de cabecera de todos los turkmenos, regalo obligatorio a los recién casados, materia de estudio en todos los colegios de Turkmenistán y cuyo conocimiento es necesario para obtener... el permiso de conducir (y no es coña). El equivalente a la Biblia, vaya. Está traducido a unos treinta idiomas, entre los cuales, de forma sólo comprensible por la testarudez y malevolencia de sus émulos, no está (¡aún!) el castellano, aunque sí el inglés. Haríamos bien en leerlo, ya que, según el autor: "Aquél que lea tres veces el Rukhname se hará sabio, entenderá la naturaleza, las leyes, los valores humanos. Y tras ello irá directamente al paraíso. Al acabar el primer y segundo libro del Rukhname, pedí a Alá que el que consiga leer el Rukhname tres veces, en su casa, una hora al amanecer, una hora por la tarde, vaya inmediatamente al paraíso." 2005 fue declarado, por decreto, año del Rukhname, y el mes de septiembre vio cómo su nombre cambiaba a Rukhname. Por cierto que iban quedando menos meses disponibles, porque el Turkmenbashí ya se había dedicado uno (enero dejó de ser enero y pasó a ser "Turkmenbashí") y dedicó abril a su madre.

Esperemos que Dios, en estas fechas, haya perdonado al Turkmenbashí los pecados que pueda haber cometido y le reúna con sus lectores, porque, ciertamente, me puse a leer el Rukhname y tras conseguir pasar los primeros párrafos del libro, ya lo creo que quien consiga leerlo tres veces se habrá ganado el Cielo.