miércoles, 26 de marzo de 2008

Afirmación identitaria

Al poco tiempo tuve que volver a la paraeta:

- Otras dos cajas de chinos, por favor.

Y, finalmente, ya tuve que ponerme serio:

- Chiquetes, tornem a casa, que ja és hora de sopar. (Niñas, volvamos a casa, que ya es hora de cenar)
- Sí, pero, ¿tirarem més petardos?

Al día siguiente, volvimos a la mascletà.

- ¿Aon vas? (Adónde vas?)- le dije a Ro, que la víspera quería alejarse más y más.
- ¡Més prop! (¡Más cerca!)
- ¡Pero si estem a cinc metros de les carcases! (¡Pero si estamos a cinco metros de las carcasas!)

En fin, que el olor a pólvora, como otras tantas veces, había obrado la conversión del neófito, y ya tenía a dos peligrosas falleritas en la familia. A lo mejor era el momento de un acto identitario... pues sí, claro que sí.

- Chiquetes... (Niñas...)
- ¿Qué, papà?
- ¿Vos agraden les falles? (¿Os gustan las fallas?)
- Síiiiii...
- ¡NO VOS ESTIC SENTINT! (¡NO OS ESTOY OYENDO!)
- ¡SÍ, SENYOR!
- ¡MÉS FORT! (¡MÁS ALTO!)
- ¡SÍ SENYOR!
- ¿I QUÉ ÉS VALENCIA?
- ¡VALENCIA ÉS LA MILLOR TERRETA I LA MÉS BONICA DEL MÓN, SENYOR! (¡VALENCIA ES LA MEJOR TIERRA Y LA MÁS BONITA DEL MUNDO, SEÑOR!)
- Molt bé... (Muy bien...)

Bueno, por este viaje, objetivo conseguido. Ya podemos estar unos meses en Moscú con tranquilidad identitaria.

4 comentarios:

Operación Matrioska dijo...

Por ser quien eres, me creeré esta última conversación... pero suena un pococomo la manipulación del NO-DO del gol de Marcelino... :))

Aunque no valenciana, algo de sangre levantina corre por mis venas, y así fue como con 5 añicos, imitando a mis hermanos y con cierta (y preocupante) atracción por el fuego y sus derivados, me ocurrieron "2 hechos que a relatar os cuento", como diría el Coronel.

- El primero fue en la época en la que le mangaba a mi madre el mechero del bolso, y me iba con mis amigos a hacer hogueras por el barrio. Aquella tarde, se nos fue de las manos, y prendimos fuego a la enredadera de nuestra torre de 14 pisos .... Cuando los bomberos llegaron, nosotros estábamos ya llegando a Parla, soñando con prisiones ....

- La segunda fue más trágica. Recién comprados unos petardos, encendí uno y mientras me alejaba, noté cierto calor en la mano. Demasiado tarde comprendí que los otros petardos que tenía también habían prendido.
Tres dedos de la mano que desde entonces no puedo doblar no sirvieron para librarme de la mili pero sí para tener una letra lamentable, y tocar la guitarra con un estilo propio e inimitable (que tampoco me llevará al Carnigie Hall, por cierto).

Sí. puede que por eso nunca haya estado en las Fallas. Pero una reciente conversación con Amadeo, ha germinado cierto deseo de visitarlas. Quien sabe si el próximo año.

Esther Hhhh dijo...

Ainssssssss Alfito Alfito, está claro, no hay nada como tirar petardos, jijijiji, se aficionaron pronto, claro llevan sangre valenciana y de muy alta calidad, en las venas, no podía ser de otra manera, no señor, tenían que aficionarse a las fallas jijiji... Ainssss este año yo no pude ir a ninguna mascletà en la plaza, pero eso sí, vi una desde mi futura casa, que vamos... A pie de mascletà estaba.. O mejor dicho, a balcón de mascletà jejejeje... Vamos que si en vez la de la fallita del barrio, fuera la del Ayto, la hubiera flipado pero bien, ainsssssssss

Besitosssssss

Alfor dijo...

Boots, efectivamente hay que tener cuidado. Antes de usar los petardos les di una clase práctica que incluía temas como "Tema 1. Por qué hay que llevar los petardos en una bolsa aparte y sostener en la mano exclusivamente el que se va a prender. O también: Tema 2: Colocación del chino y de la mecha en ángulo agudo alejándose del cuerpo de quien lo sostiene, entre otros básicos.

En todo caso, si mantienes la atracción por el fuego, harás bien en ir a las Fallas, que es culto al fuego en estado puro.

Estherita, es un motivo para cambiar de domicilio y dejar ese pisito en la Olivereta por uno encima del Rialto o el Ateneo. Tú no hagas caso del pastón que puede costar. Ya sabes: "Val més un gust que cent panderos" :)

Esther Hhhh dijo...

Jajaja, ALfito.. ¿y tú como sabes que la falla de barrio es la Olivereta, te dije dónde estaba mi piso nuevo y no me acuerdo? jejejee... Pues te voy a decir una cosa: ¿sabes de lo primero que me acordé? De cuando aparecíamos por esa falla armados de cuchara lo noche del concurso de paellas, jajajajaja

besitossss