lunes, 15 de octubre de 2007

Prohibiendo

Un antiguo cuento, entre cuento y chiste, comparaba las formas de prohibir en los distintos idiomas y sacaba conclusiones sobre el carácter de los distintos pueblos que las hablaban. Veamos.

El alemán, cuando prohibe, tiene que imponerse. En alemán, la prohibición es seca, siempre con un signo de admiración, recia y no admite discusión. La prohibición de pisar el cesped sería algo así como: Rasen nicht betreten!, que suena fuerte y no pretende otra cosa ¡No se pisa el césped! Y punto.

El francés no. El francés es indulgente, educado, amable, un pelín relamido si se quiere, hasta algo hipocritilla, y apela incluso en sus prohibiciones al respeto a los demás. Sería algo así como "Veuillez bien de ne pas marcher sur le gazon". Vamos, que de prohibición no parece tener mucho algo que traduciríamos como "Tenga usted la bondad de no caminar sobre el césped".

El español constata simplemente que algo no se debe hacer, y luego se desentiende del resultado. La expresión típica es "Prohibido pisar el césped." Yo ya te he avisado, luego tú haz lo que quieras que para eso eres libre. Seguramente lo pisarás. Yo, con decirte que no lo hagas, he cumplido.

El cuentecillo, con intención, terminaba con la traducción al catalán, alusiva a cierto estereotipo que se les atribuye a los catalanes: "No xafeu la xespa. Qué es guanya amb aixó?"

¿Y en ruso? El chistecillo no dice nada, pero en la foto de arriba tenemos la explicación. Para que el ruso obedezca, hay que convercerlo pero que muy bien. Rusia está llena de gente nadando bajo el cartel de "Prohibido bañarse", de coches aparcados junto a la señal de prohibido aparcar... e incluso se diría que da más morbo hacerlo allí. Y así, la forma de prohibir pisar el césped es una retahila en la que se desgranan los argumentos más convincentes de que dispone el prohibidor. Véase la traducción literal del cartel de arriba: "Pedimos insistentemente que no se sienten ni se acuesten sobre el césped. La fijación del césped se ha realizado siguiendo una tecnología especial, mediante el uso de hierba en rollos, que necesita no menos de tres años para su implantación en la tierra."

Vamos, que el que escribió eso no las tenía todas consigo. Y la prueba de que espera un comportamiento mucho mejor por parte de los extranjeros que de los nacionales es la traducción que ha hecho al inglés de toda la retahila antecedente: "Keep off the grass." Cuatro palabras. Ni una más. Hasta los rusos confían en el carácter estrictamente práctico de los anglosajones.

3 comentarios:

Esther Hhhh dijo...

Madre del Amor Hermoso, Alf.. Prohibir en Rusia es todo un arte, por lo que veo... ¿Y hacen caso a toda esa retahila?

Por cierto, que he estado fuera toda la semana y no he podido leerte, pero ya me he puesto al día, jejeje, así que ala, a contestarme jejejejeje...

Besitosssss

Ginebra dijo...

Um... es que explicar todo eso en inglés les debía resultar francamente difícil. O eso, o les daba miedo que se descojonaran de ellos por usar esas técnicas tan difíciles para poner cuatro yerbajos.
:-)

Alfor dijo...

Esther, caso, lo que es caso, pues de todo hay.

Ginebra, sí, el traductor debió quedarse la mar de contento.