lunes, 7 de octubre de 2013

Próxima apertura

En ruso, "próxima apertura" se dice "skóro otkrýtie" (скоро открытие). En Roza Jútor, es la expresión más escrita. Uno se da una vuelta para comprar por lo menos una botella de agua y no tener que beber directamente del río, y se encuentra con que le han metido en una trampa. Por una parte, y como vimos en la última entrada, no hay manera de salir de aquí. Lo intenté en dirección a Esto-Sadok, un pueblo fundado por estonios a finales del siglo XIX y al que la civilización ha llegado de golpe, arrasándolo todo. Ni pum. El camino estaba cerrado por excavadoras, vallas y todo tipo de impedimentos. La única forma de llegar era por la única carretera... por la que también llegaban todo tipo de hormigoneras. Y es que, sí, quedan algunos defectillos por pulir antes de que comiencen los Juegos Olímpicos.

¿No sería lógico que en un sitio así, además de hoteles a tutiplén, hubiera tiendas de material deportivo? Y las hay... o, mejor dicho, las habrá. Veamos aquí abajo la tienda de Bosco, esa famosa empresa rusa que equipó a los deportistas españoles en los Juegos Olímpicos de Londres, de manera que parecía que fueran a disputar la medalla de cobre.


Vale, sí, la tienda está cerrada. En un sitio tan elevado, donde bien puede hacer frío, se agradecería algo de ropa de invierno. Y, efectivamente, "The North Face" ha alquilado un local...


...pero lo abrirán próximamente, porque, lo que es ahora, nasti de plasti. La misma suerte corren otras dos tiendas de deporte: "скоро открытие" para todos. Aquí va una...


...y aquí está la otra.


En la entrada pasada vimos que, para salir o entrar aquí en transporte público, hay que proponérselo muy seriamente. Los hoteles y las empresas de construcción, que son las dos cosas que funcionan (mal, pero lo hacen), traen a sus trabajadores a diario desde Adler, Sochi o Krasnaya Poliana, porque aquí ni siquiera hay viviendas ¿Y no sería una buena idea poner un alquiler de coches?


Bueno, pues la idea ya la tuvo alguien. Ahora falta que tenga la idea de abrirla.

Según la página web del sitio, es posible adquirir recuerdos muy monos en la tienda de recuerdos del lugar. Esto demuestra una vez más que de Internet hay que fiarse lo justito, porque uno la ve y Roza Jútor le parece un lugar rebosante de vida, hasta el punto de que uno no comprende cómo ha podido pasar tanto tiempo sin él. Sin embargo, la tienda de recuerdos, en realidad, es la de abajo:


Y está más cerrada que una edición del Ruhnama en latín.

Aquí abajo hay otra tienda, llamada rimbombantemente "Opera Gallery". Bueno, mejor dicho, habrá otra tienda.


Si nos hacen daño los ojitos, el día menos pensado nos los podremos tratar. Lo de abajo es una óptica con los métodos más avanzados...


... lo único que no es avanzado es su apertura, que más bien se retrasa.

¿Y dónde se puede conseguir la bebida nacional, es decir, cualquier cosa que tenga alcohol, cuanto más mejor? Ahora, en ningún sitio. El que tenga muchas ganas de beber puede desplazarse varios kilómetros, saltando por encima de las obras, o esperar a que abra la tienda de abajo. Próximamente, claro.


Jo, si ni siquiera estos pollos de abajo se han decidido aún a abrir. Si lo hubieran hecho, yo creo que no hubiese salido de allí, con lo poco que me gusta.


En resumidas cuentas, que mal asunto. El servicio de los hoteles es lamentable, me han hecho la habitación, atención, a las ocho ¡de la tarde!, la comida es de impresión, sólo que de impresión negativa. A todo esto, uno ve la página de Wikipedia (sobre todo en ruso) y le parece que vaya pasada de sitio. También dice que fue terminado de construir en 2011. Las excavadoras que hay por todos los sitios deben estar para reparaciones menores. En realidad, es evidente que la página de Wikipedia (no, no hay que fiarse de Wikipedia) está encargada por Vladímir Potanin, oligarca de pro, presidente de Interros y amo del cotarro. Uséase: promotor del engendro éste.


Lo que dice la sombrilla de ahí arriba es: "Aquí no hay prisa. Disfrutando de la vida."

Pues como se lo crean, cuando sean los Juegos Olímpicos nos vamos a reír.

2 comentarios:

Miguel dijo...

Eres un grande Alfor

me encanta el concepto alquilo local, pongo pegatina grande, el día de la inaguración abro, vendo todo lo que puedo y después si te he visto no me acuerdo,

la verdad es que había rumores sobre lo mal que va el tema de Sochi pero no me esperaba esto. Da gusto tenerte en Bruselas!

jaja

un saludo!

Alfor dijo...

Miguel, cierto. Si no hubiera estado por Bruselas, no me planto en Sochi de ninguna manera.

Al final, harán una chapucilla para que los altos dignatarios no noten demasiado el desastre, y lo venderán como un éxito. Lo reconocen ellos mismos, cuando les preguntan.