lunes, 31 de agosto de 2009

Músicos acabados (V)

En la época en que el gran Repin le hizo el retrato a ese señor de napia rubicunda, desaliño general, batín de color indefinido y cara de tontaina, al modelo le quedaban pocos días de vida, así que el pintor tuvo de darse prisa para terminarlo antes de quedarse compuesto y sin modelo. De hecho, sólo tardó cuatro días en acabarlo.

En la época del cuadro, Modest Mussorgsky era un músico acabado. Sí, en el pasado también había músicos acabados, no sólo ahora. En esta bitácora hemos visto bastantes músicos acabados, pero claro, normalmente es gente que está razonablemente bien de salud y cuyo motivo de acabamiento consiste en que su creatividad se ha secado, no da más de sí y prolonga su actividad musical repitiendo cosas que ya han hecho para engordar la cuenta bancaria. Pero los músicos acabados actuales suelen sobrevivir bastante bien, y, si no, fijaos en Deep Purple, o en Jethro Tull, que ya eran famosos cuando Gorbachov era becario.

Modest Mussorgsky era un tipo raro. Como era innovador, no todo el mundo comprendía su música, en buena parte porque sus mejores obras las dejó a medio terminar o con versiones para piano que luego fueron orquestadas por amigos suyos, en particular por Rimsky Korsakov. Además, era una especie de "hippie" avant la lettre. Uno piensa que los años sesenta (y setenta) del siglo XX fueron la repera de los excesos, y que gente como Janis Joplin, Jim Morrison, Syd Barrett y tantos y tantos otros, muchos de los cuales la palmaron antes de estar realmente acabados, eran tipos autodestructivos sin antecedentes en otras generaciones. Vamos, que querían algo así como cambiar la sociedad, pero la sociedad se quedó mayormente como estaba, o peor, y ellos acabaron enganchados y al poco tiempo criando malvas.

Pues nada de eso. El del retrato es un antecedente revelador de que opositores a la sociedad, bohemios y enganchados a las drogas los había habido antes. Y eso que, curiosamente, Mussorgsky era en buena parte un miembro del sistema, como funcionario público de bajo rango. Bueno, fue funcionario hasta los cuarenta años, más o menos, cuando ya probablemente no servía para nada y algún superior cayó en la cuenta de que Mussorsgky pasaba mucho más tiempo en la taberna que en el trabajo, y que posiblemente a estas alturas casi era mejor que no hiciera nada, no fuera a liarla parda.

Por lo demás, su vida era... ¿cómo diríamos?... desordenadilla. Vivía, por así decirlo, en una especie de comuna con otros seis tipos tan borrachos como él, que la fueron palmando regularmente mientras creían que su alcoholismo era una forma de rebeldía contra el orden establecido. En los años setenta del siglo XX era la heroína, sobre todo, la que iba abriendo las tumbas donde iban cayendo Syd Vicious, Tommy Bolin...; en los del siglo XIX la heroína no se había inventado, pero el vodka sí y, como sabemos, en Rusia sigue siendo el modo más popular de autodestrucción. Mussorgsky hizo el camino hacia la tumba de manera bastante consecuente, mientras sus colegas compositores, que sabían lo que era capaz de hacer y lo que se estaba perdiendo el mundo, se echaban las manos a la cabeza. A partir de los primeros años setenta el alcoholismo de Mussorgsky ya era demasiado evidente, y la ingestión de bebidas comenzó a ocupar progresivamente más tiempo que la composición. Ya digo que buena parte de sus obras estaban inacabadas, y algunas que procedían de etapas anteriores, como la famosa "Una noche en el Monte Pelado", nunca fueron estrenadas en vida del autor.

Me encanta casi todo lo que compuso Mussorgsky. En mi adolescencia podía pasarme muchísimo tiempo escuchando "Una noche en el Monte Pelado" o "Cuadros de una exposición" ¡Incluso, con quince años, me tragué una transmisión enterita de la ópera "Borís Godunov"! "Borís Godunov" dura unas cuatro horas, con lo que la cosa tuvo mucho mérito, pero debo reconocer que desde entonces le tomé manía.

En la época del retrato, Modest Mussorgsky aparenta por lo menos sesenta años, pero lo cierto es que aún no había cumplido cuarenta y dos. Murió unos días después de su cumpleaños. Y mucho ojo con decir que no era tan joven, y menos hoy. :)

viernes, 28 de agosto de 2009

Rusófilos

Últimamente (vamos, como que ya llevo un par de años así) estoy hecho una madre, un esperpento, un blando, en suma, que se aparta de las polémicas como de las llamas del infierno. Y eso no puede ser, así que, en plan terapia, toca escribir una entrada diferente. Una entrada sobre rusófilos, que nos recuerda a aquélla en la que pudimos ver a varios de ellos desplegar todo su genio dialéctico y asombrar al mundo con las palabras más soeces que jamás han adornado esta bitácora.

Y es que yo me he pasado la juventud rodeado de rusófilos, y no de cualesquiera rusófilos, no, sino de rusófilos "pata negra", que lo eran desde antes de que cayera el telón de acero, España se llenara de rusos (y, sobre todo, de rusas) y los españoles se dieran cuenta de que las rusas les molaban mazo. Este factor hizo aumentar considerablemente el número de rusófilos. Pero eso no quiere decir que no los hubiera antes, no. Ya lo creo que los había. Y es ya la hora de acercarse a este fenómeno tan insólito en un país, como España, al que Rusia le pilla a varios miles de kilómetros y con el que no ha tenido ni guerra ni paz a lo largo de la práctica totalidad de nuestra historia. Vamos, que casi siempre nos hemos ignorado mutuamente.

Antes de continuar, recordemos: Todo lo que se cuenta aquí debería tomarse con sentido del humor. Si usted no se ve capaz de hacerlo, y aun así persiste en entrar y leer, sepa que no va por usted, que lo que se cuenta está fuera de contexto y que incluso es posible que no sea ni verdad.

En el diccionario de la Real Academia Española no aparece la entrada "rusófilo", lo cual es una lamentable omisión que no sé como los propios rusófilos no han denunciado con su vehemencia usual, entre acusaciones de conspiraciones antirrusas por parte de los académicos. Así pues, para obtener una definición académica tenemos que proceder por analogía. Tenemos, por ejemplo, "francófilo", que la Academia define como "que simpatiza con lo francés o lo admira". Así pues, según la Academia, rusófilo será aquél que simpatiza con lo ruso o lo admira.

A lo largo de mi vida, he conocido a los suficientes rusófilos como para poder matizar esta definición. Y es que la definición de la RAE es banal, generalista y no hace sangre; es para dejar contento a todo el mundo. Ciertamente, los académicos no tienen por qué meterse en berenjenales, y mucho menos con la definición de una palabra de la que, además, se habían olvidado, pero yo sí, así que ahí va mi definición beligerante de rusófilo español: Dícese del español de sexo masculino que detesta cordialmente a los Estados Unidos de Norteamérica, le gustan las mujeres rusas y por extensión lo ruso, es de izquierdas y reside en España, aunque esporádicamente aparece por Rusia, nunca para estancias demasiado prolongadas.

Lo sé, lo sé, es demasiado largo. Pero bueno, vamos a analizar los distintos puntos que definen al rusófilo:

1.- Detesta a los Estados Unidos de Norteamérica. Esa condición es necesaria. Si hay un rusófilo que puede soportar a los gringos, es un infiltrado y un impostor y urge desenmascararlo cuanto antes. No he conocido a ningún rusófilo que no rechine los dientes y lance algún comentario despectivo cuando sale a colación ese país innombrable. Obviamente, Bush (padre o hijo, cualquiera vale) es el centro de todos los males, Reagan (uno de los causantes, no lo olvidemos, del colapso de la URSS) un enviado del Maligno y, ojo, incluso Obama es malo. Sí, sí, Obama, ése que tan simpático cae a los progres de todo el mundo. Pues al rusófilo fetén tampoco le acaba de convencer. Por si acaso.

2.- Es de género masculino. ¡Hala! ¡Ahí te has pasado!, diréis. Pues no me he pasado. Teóricamente, claro, podría haber rusófilAs, pero, qué va, no resulta creíble. A una rusófila le faltaría... no sé, vehemencia, creer en una conspiración mundial con la exclusiva intención de hundir Rusia. Bueno, y que le gustaran las mujeres rusas. Podría ser, claro. De todas formas, las mujeres españolas que he conocido a las que les gustaba lo ruso y que podrían haber sido candidatas a la rusofilia han durado poquísimo en esta condición.

3.- Le gustan las mujeres rusas. ¡Y a mí, que no soy rusófilo, pero me gustan las tías buenas!, diréis todos al unísono. Sí, es verdad, pero a vosotros también os gustan las tías buenas de otros países, picarones, igual que a mí. Un rusófilo fetén, pero fetén fetén, tiene una predilección especial por las mujeres rusas. Si le ponen delante a Elsa Pataky y a Dinara Safina, le interesa más Dinara Safina, y a los demás no. Si fuera Sharapova, aún podríamos discutir el asunto, pero ¡Dinara Safina! ¿De qué van?

4.- Es de izquierdas. Bueno, esto con matices. En realidad, hay alguna "rara avis" de rusófilo que no es de izquierdas, que admira la espiritualidad eslava y que sueña con que sirva de contención a esta ola de libertinaje que nos invade. Conozco a uno, inasequible al desaliento, que piensa así, pero está muy despistado y no sé en qué Rusia está pensando, pero desde luego no en la que vivo yo. El día que pise Rusia y se entere de algo se reformará y abandonará esas ideas raras que tiene.

No, el rusófilo fetén es de izquierdas. No necesariamente comunista, sino que puede ser sociata, progre de distinto pelaje... claro, esto es un poco redundante, porque todos los izquierdistas españoles detestan cordialmente a los Estados Unidos, y esto ya lo habíamos tratado. Entre los demás españoles también hay muchos que no le molan nada, pero, vaya, no es lo mismo. Y, si en España hay algún simpatizante de Estados Unidos, desde luego lo encontraremos entre los peperos, pero no entre los progres de izquierda.

Lo curioso es que la Rusia actual se parece a un régimen de izquierdas tanto como el de Franco, pero, claro, está todavía ese poso soviético antifa que aún pesa bastante. Así que, aclarados, el rusófilo tipo (rusophilus rusophilus) es de izquierdas.

5.- Reside en España. Claro, yo sólo conozco a rusófilos españoles, así que no puedo juzgar si los rusófilos alemanes, pongamos por caso, podrían vivir en Rusia o deberían vivir en Alemania. En el caso de los españoles, la residencia en España en prácticamente necesaria. Abundan los casos de conspicuos rusófilos mientras estuvieron en España que, llegados a Rusia, han perdido su rusofilia en poquísimos meses, cuando no semanas. Es más: muchos de ellos, si escribieran una bitácora, iban a contar cosas mucho más fuertes de las que leéis en ésta.

En cambio, mientras están en España, los rusófilos pueden hacer cosas como ir a la Pilarica, comer churros con chocolate, bañarse en Almuñécar, irse de tapeo por Segovia, ponerse morados de jamón, hacer gazpacho casero... e imaginarse que Rusia es la Arcadia feliz, porque, total, está a cuatro mil kilómetros y los que disfrutamos, o algo así, de la Arcadia feliz somos otros.

Eso no quita con que el rusófilo visite Rusia, pero con mesura, sin pasarse. Un buen motivo para no pasarse es que las autoridades rusas no le dejan quedarse legalmente más de tres meses como máximo, a no ser que supere una gymkhana burocrática que ríete de Kafka, pero, si el rusófilo es sincero, eso no suele alterar sus convicciones. Porque, claro, Rusia hace eso para protegerse de los terroristas.

Hasta aquí, la definición. Creo que ha quedado claro que no soy rusófilo, aunque sólo sea porque no cumplo esta última condición, pero, obviamente, tengo un pasado, y ese pasado se ha desarrollado en España. Así que, ¿quizá haya sido rusófilo alguna vez y el cambio de residencia ha tenido algo que ver en mi camino de Damasco?

Quizá. Yo creo que no, pero eso quedará para otra ocasión.

miércoles, 26 de agosto de 2009

Ahorro de energía

Hace unos meses, fueron noticia las medidas draconianas de ahorro que impulsó el Ministro de Industria español, Miguel Sebastián, y que, por ejemplo, aparecen recogidas aquí. Citemos en particular una muy llamativa y que al parecer debe aplicarse a rajatabla en todas las dependencias del mencionado ministerio:

La medida energética que más está incomodando a los trabajadores de Industria es la nueva climatización de las salas. A partir de ahora, la temperatura nunca podrá ser inferior a 26 grados centígrados en época de verano, ni superior a los 21 grados en los meses de invierno.

La idea es buena. La peña funcionarial española se excede con la calefacción en invierno y va en camiseta por los pasillos, pudiendo abrigarse un poco más y desconectar las estufas. Y, en verano, abusa cosa mala del aire acondicionado, pudiendo quitarse la corbata y seguir el ejemplo del propio Sebastián para hacer los calores españoles más llevaderos y ahorrar una parte de esos 110 millones de euros que la crisis y los recortes presupuestarios han evaporado de los fondos del Ministerio.

Eso sí, el hecho de que la medida haya sido adoptada mediante una circular interna dirigida a las dependencias del Ministerio de Industria en todo el mundo demuestra un poquitín de falta de adaptación a las circunstancias locales.

Así, en la delegación en Moscú del Ministerio de Industria español deben estar en una tesitura complicada. Para cumplir el requisito taxativo impuesto por el Ministro de que la temperatura no sea inferior a esos 26 grados en verano (sí, estamos en verano), no queda más remedio que conectar la calefacción.

lunes, 24 de agosto de 2009

Rusismos

Uno de los problemas de tener un padre obsesionado con la corrección en el empleo de las lenguas, y en particular del castellano, es que existen tres niños que deben andar con pies de plomo cada vez que abren la boca. Lo malo es que esos mismos tres niños viven las tres cuartas partes del año en Rusia, en contacto permanente con niños rusos y sólo muy de uvas a peras con españoles. Y muchas veces sus contactos con niños españoles son con residentes en Moscú, que por regla general hablan un español bastante peor que el suyo. El resultado es que el castellano que hablan Abi, Ro y Ame, siendo bueno, presenta ciertos dejes que delatan dónde viven bastante a las claras. Voy a anotar alguno para que tome nota todo aquél que esté en mi misma situación y sepa a qué atenerse a la hora de inculcarles su lengua nativa.

Típica rabieta. Ame se pone a hacer la puñeta a sus hermanas, que estaban pacíficamente poniendo vestiditos a sus muñecas. Ro se levanta con toda la indignación de que es capaz, y es mucha, se dirige a mí y, sin una pizca de acento extranjero, suelta:

- ¡Papá, Ame me molesta jugar!

Lo cual es una traducción literal de la forma en que lo diríamos en ruso: "Папа, Аме мешает мне играть!", pero en castellano no hablamos así. Y esas cosas, claro, hay que cortarlas cuanto antes.

- Ro, ¿qué?
- Que Ame me molesta jugar.
- Estás hablando en ruso con palabras españolas ¿Cómo se dice bien?
- Mmm...
- Se debe decir: "Ame no me deja jugar". O, si quieres, "Ame me molesta cuando juego", pero nunca, nunca, nunca, como lo has dicho tú.
- Bueno, pues Ame no me deja jugar.
- Vamos a ver.

Primera ventaja de la reprimenda lingüística. Hemos conseguido cambiar de tema y a Ro se le han pasado las tres cuartas partes de la indignación que tenía encima; lo cual es una ventaja tremenda.

- ¡Ame!
- ¿Qué?
- Que dice tu hermana que no le dejas jugar tranquila, ¿es verdad?
- Eh... uuuh... - y Ame pone cara de enfadado de cara a la galería, buscando una excusa que no llega.
- ¡Abi! ¿Qué estaba pasando?

Abi continuaba tranquilamente poniendo vestiditos a las muñecas.

- Bueno, pasaba que yo con Ro estábamos jugando con las muñecas...
- ¿Cómooooo?

Efectivamente, estamos ante otra traducción palabra a palabra de la expresión rusa: "Я с Ро играли с куклами", pero en castellano no hablamos así. Las niñas lo saben, pero los primeros días de estancia en España se descuidan un poco.

- ¿Qué has dicho?
- Estoo... que Ro y yo estábamos jugando a las muñecas.
- Bueno, bueno, ahora sí.
- Y Ame se puso a molestarnos especialmente.
- ¿Cómoooooo?

Y otra. "Especialmente", en realidad, debería ser "a propósito", o "adrede", lo que ocurre es que en ruso eso se dice "специально" y resulta casi inmediato decir en castellano "especialmente" que, sin embargo, quiere decir otra cosa.

- Estooo... quiero decir que lo hacía adrede.
- ¿Y dónde está Ame ahora?
- No sé.
- Ya se nos ha fugado. ¡Ame!
- ¿Qué, papá?
- ¡Ven aquí enseguida!

Ame acudió.

- ¿Que estabas haciendo?
- El primo Sedlex me estaba aprendiendo jugar al ajedrez.

¡Nooooo! Por si no fuera poco con los rusismos, llega el primo francés y les inculca galicismos. Efectivamente, es una traducción palabra a palabra de: "Le cousin Sedlex m'apprend jouer aux echecs"... sólo que en castellano tenemos el verbo "enseñar".

Está visto que ni en España puede uno bajar la guardia.

- ¡Hala! ¡A hacer todos los deberes!
- ¡Pero, papá! ¡Que estamos de vacaciones!
- Bueno, era por si acaso... ¡pero como no me habléis bien os vais a enterar!

viernes, 21 de agosto de 2009

Pito, pito

Pito, pito, colorito,
donde vas tú tan bonito,
a la era verdadera,
pin, pan, fu-e-ra.


Este es el sistema de eliminación-elección de toda la vida en los hogares españoles. Son como las palabras mágicas usadas para tomar decisiones sin violencia. Y, en efecto, así estaba ocurriendo en el MacDonald's de Alcira, capital de la comarca de la Ribera Alta y urbe por excelencia de la zona, en dura rivalidad con Sueca, y donde estaba teniendo lugar un encarnizado conflicto entre Abi y Ro, que querían las dos precisamente la misma Polipocket del Happy Meal. Las dos eran casi iguales, pero una era morada y la otra verde y, naturalmente, no era cosa de ponerse de acuerdo en quién se quedaba con qué.

Así las cosas, en lugar de estirarse del pelo, se decidieron por el pito-pito como forma más civilizada de resolución de conflictos. El pito-pito lo aprendieron de pequeñas en un jardín de infancia de Valencia donde utilizaban una versión ampliada.

Pito, pito, colorito,
donde vas tú tan bonito,
a la era verdadera,
Pin, pan, fu-e-ra,
tú te vas y tú te quedas.
En la casa de Pinocho
todos cuentan hasta ocho:
un, dos, tres, cuatro,
cinco, seis, siete y-o-cho.


Lo que pasa es que, sobre todo entre dos personas, el pito-pito tiene truco y siempre gana, si quiere, el que lo está recitando. Uno sólo tiene que juntar, o no, las dos últimas sílabas de manera que le toque al otro.

Y, como ninguna de las dos es tonta, las dos ganaban cada vez que les tocaba a ellas.

El problema era que, en vista del poco éxito de la solución adoptada, la idea de estirarse del pelo volvía a cobrar fuerza.

- ¡Espereu! (¡Esperad!) - intervino Ame - ¡Vaig a fer-ho jo, que sóc neutral! (¡Voy a hacerlo yo, que soy neutral!)

Y comenzó muy serio, pero con voz alta, muy alta:

Шла кукушка мимо сети,
а за ней её дети.
Кукушата просят пить,
выходи - тебе водить!


Lo transcribo:

Shlá kukúshka míma siéti,
a za nyéi yeyó diéti.
Kukusháta prósiat pit,
vijadí - tibié vadít.

Si queréis que todos los clientes de un MacDonald's español dejen lo que estén haciendo y se os queden mirando con cara de alucinados, no tenéis más que pronunciar esas palabras.

Al menos, a Ame le funcionó de maravilla.

miércoles, 19 de agosto de 2009

Himno estatal de Rusia

Y con esto llegamos al día de hoy y al final de la serie de himnos históricos rusos. El nuevo hombre fuerte de Rusia, tras la dimisión de Yeltsin, pasó a ser Putin, del que todos habéis oído hablar. Putin se propuso acabar con el cachondeo que había habido durante los últimos años, con un presidente, siendo generosos, desafortunadillo, y con el prestigio de Rusia bastante lejos de sus mejores tiempos. Ha tenido la suerte de que le han tocado los años de las vacas gordas, con unos precios del petróleo como para no saber qué hacer con tanta pasta, y lo ha aprovechado para reforzar el poder central, que estaba en una situación de débil para arriba, con algún guiño a la Unión Soviética, lejos del, llamemos, revisionismo histórico de los noventa.

Entre otras cosas, tuvo que abordar la cuestión del himno. La Canción Patriótica de Glinka fue aparcada y, en su lugar, se recuperó a Serguey Mijalkov, aquél que en 1943 puso en marcha el himno soviético, que es el señor de la foto y que a la sazón estaba a punto de cumplir 87 años (ahora anda por los 96, y ahí que sigue el tío). Con alguna ayudita de las estructuras estatales, y con la misma música que tenía el himno soviético, y que en su día ya fue el Himno del Partido Bolchevique, Mijalkov compuso la siguiente letra:

Россия — священная наша держава,
Rusia es nuestro sagrado imperio,
Россия — любимая наша страна.
Rusia es nuestro querido país.
Могучая воля, великая слава —
Poderosa voluntad, gran gloria,
Твоё достоянье на все времена!
lo que has logrado es para siempre.

Припев (Estribillo):

Славься, Отечество наше свободное,
Gloríate, libre patria nuestra,
Братских народов союз вековой,
secular unión de pueblos hermanos,
Предками данная мудрость народная!
¡sabiduría popular de los ancestros!
Славься, страна! Мы гордимся тобой!
¡Gloríate, patria, nos enorgulleces!

От южных морей до полярного края
De los mares del sur al Polo Norte
Раскинулись наши леса и поля.
se extienden nuestros bosques y campos.
Одна ты на свете! Одна ты такая —
¡Sólo tú en el mundo!¡Sólo tú eres tal,
Хранимая Богом родная земля!
tierra patria guardada por Dios!

Припев (Estribillo)

Широкий простор для мечты и для жизни
Una extensión para soñar y vivir,
Грядущие нам открывают года.
nos abren los años futuros.
Нам силу даёт наша верность Отчизне.
La fuerza la da la lealtad a la Patria.
Так было, так есть и так будет всегда!
¡Así fue, así es y así será siempre!

Припев (Estribillo)

Y así hemos llegado hasta el día de hoy. Como muchas veces digo a los que me piden que les diga qué va a pasar en Rusia, todo el que intenta predecir el futuro de Rusia miente con casi total seguridad, así que no es de excluir que el día menos pensado cambien de nuevo de himno y, puesto que ya han adoptado las músicas del inglés y del francés, quizá algún día adopten el español.

Al menos, así, tendría una letra, porque, si somos nosotros los que hemos de ponernos de acuerdo en una, apañados estamos.

lunes, 17 de agosto de 2009

Canción patriótica

En 1990, la Unión Soviética ya tenía las costuras del traje que daban pena. Las repúblicas bálticas campaban por sus respetos, las caucasianas estaban incluso en guerra entre ellas y, para colmo, nada menos que en Rusia los miembros del Congreso de Diputados Populares se estaban pensando lo de permanecer en la URSS. Hablar de la "unión indestructible de repúblicas soviéticas" sonaba como poco a cachondeíto.

En esto, en noviembre de 1990 interpretaron con motivo de la apertura de las sesiones del Congreso la "Canción Patriótica", de Glinka, el padre de la música rusa. A los diputados les debió gustar tanto que la adoptaron por unanimidad como himno de Rusia, mientras como himno soviético seguía el anterior. Hay que decir que en los parlamentos de la Unión Soviética, en distintos niveles, lo normal era que las cosas se aprobaran por unanimidad. Por si acaso.

La Canción Patriótica no tenía letra y nunca llegó a tenerla, lo cual la convierte en un himno semejante al español. En medio de las controversias de los tremendos años noventa, con los liberales zumbando por un lado, los comunistas conservando una enorme fuerza, los de la vieja guardia transformados en no se sabe muy bien qué, mucho nacionalista en ascenso, y una guerra en Chechenia, que además estaban ganando los chechenos, la Duma era una jaula de grillos incapaz de ponerse de acuerdo en nada sustancial, y menos en una letra que pusiera de acuerdo a todo el país. En lo cual, fuerza es decir, los españoles tenemos una semejanza tremenda con los rusos.

Sin embargo, hubo una letra que estuvo cerca de ser aprobada mediante el método como se hacen las cosas en Rusia, es decir, por las narices del Jefe del Estado. Sin embargo, en este caso el mencionado Jefe del Estado, a la sazón Borís Yeltsin, estaba totalmente para el arrastre y dimitió. Precisamente dimitir es lo que estaba haciendo Yeltsin cuando le tomaron la foto que ilustra esta entrada, el día de Nochevieja de 1999.

Llegaban otros tiempos. Los actuales.

viernes, 14 de agosto de 2009

Himno estatal de la URSS

En los años veinte del pasado siglo, y más señaladamente a partir del momento en que la salud de Lenin le dejó literalmente tirado, en el partido bolchevique se formaron dos tendencias irreconciliables. Tan irreconciliables, que cuando una de ellas se hizo con el mando definitivo, se dedicó a deshacerse de la otra a base de exiliar a sus jefes, en el mejor de los casos (aunque después se les podía asesinar), y de purgas, torturas y trabajos forzados, en la práctica totalidad de los mismos.

Una de las fracciones, de acuerdo con el ideal internacionalista del movimiento obrero, aspiraba a perseguir como objetivo inmediato la revolución mundial y montar un cirio como el ruso por todos los países a base de incendiar el globo si hacía falta, para luego, sin molestos países burgueses, dedicarse a construir el socialismo. El jefazo visible de esta fracción era Lev Trotzky.

La otra fracción estaba encabezada por el Secretario General del Partido, un cargo administrativo que se pensaba que era de segundo orden y que no tendría mucha influencia en la batalla ideológica del Partido, por lo que fue encomendado a un señor georgiano bajito que no hablaba muy bien el ruso y que no parecía tener muchas luces. Para sorpresa de quienes habían despreciado el cargo, el señor georgiano bajito, llamado Iosif Stalin, no sólo tenía luces, sino que además fue capaz de convertir su cargo del Partido en la poltrona más importante del país, de la que ya sólo salió más de treinta años después, y eso con los pies por delante.

Esta fracción pretendía aplazar la revolución mundial hasta mejores tiempos y construir el "socialismo en un solo país", Rusia, y fue la que se llevó el gato al agua. Poco a poco, Stalin comenzó a ir más más lejos y a recuperar un nacionalismo ruso bastante evidente.

En este contexto, el himno soviético, la Internacional, le sentaba a la URSS como a un santo dos pistolas, así que se convocó un concurso para adoptar un himno más acorde con las circunstancias. Ganó la canción propuesta por Serguey Mijalkov (de quien volveremos a hablar dentro de un par de entradas) y Gabriel El-Registan, que reza... digo, uf, que tiene el texto siguiente:

Союз нерушимый республик свободных
Unión indestructible de repúblicas libres
Сплотила навеки Великая Русь.
que unió para siempre la gran Rusia.
Да здравствует созданный волей народов
¡Viva la formada por voluntad de los pueblos,
Единый, могучий Советский Союз!
la unida y potente Unión Soviética!

Припев (Estribillo):
Славься, Отечество наше свободное,
¡Gloríate, Patria libre nuestra,
Дружбы народов надёжный оплот!
sólido pilar de la amistad de los pueblos!
Знамя советское, знамя народное
¡La bandera soviética, la bandera del pueblo
Пусть от победы к победе ведёт!
nos llevará de victoria en victoria!

(Партия Ленина — сила народная
Нас к торжеству коммунизма ведёт!)
(¡El partido de Lenin, que es la fuerza del pueblo,
nos conducirá a la apoteosis del comunismo!)


Сквозь грозы сияло нам солнце свободы,
A través de las tormentas nos brilla el sol de la libertad,
И Ленин великий нам путь озарил.
y el gran Lenin nos alumbra el camino.
Нас вырастил Сталин — на верность народу
Nos educó Stalin en la fidelidad al pueblo

(На правое дело он поднял народы,)
(Elevó al pueblo al proceder recto,)


На труд и на подвиги нас вдохновил.
nos animó al trabajo y a las hazañas.

Припев

Мы армию нашу растили в сраженьях,
Criamos nuestro ejército en las batallas,
Захватчиков подлых с дороги сметём!
¡barreremos a los ruines invasores!
Мы в битвах решаем судьбу поколений,
¡En las contiendas decidimos el destino de generaciones,
Мы к славе Отчизну свою поведём!
conduciremos nuestra Patria a la gloria!

(Славься, Отечество наше свободное,
Дружбы народов надёжный оплот!
Партия Ленина — сила народная
нас к торжеству коммунизма ведёт!)

¡Gloríate, Patria libre nuestra,
sólido pilar de la amistad de los pueblos!
¡El partido de Lenin, que es la fuerza del pueblo,
nos conducirá a la apoteosis del comunismo!


Припев

El estalinismo pasó a caer bastante mal a la peña a partir de 1955, por lo que hubo un tiempo que el himno original, en que se cita a Stalin, ni se cantaba, para no meter la pata. En 1977, algunas partes fueron reemplazadas por la versión en paréntesis y en tipo de letra más pequeño, aunque manteniendo la misma música.

Pero no hay mal que cien años dure, y a la Unión Soviética incluso le faltaron veinticinco para llegar a esa cifra. La "unión indestructible de repúblicas soviéticas" no era tan indestructible como blasonaba en su himno, y así se llegó a 1991.

miércoles, 12 de agosto de 2009

La Internacional

En noviembre de 1917 el Gobierno Provisional surgido de la Revolución de Febrero se encontró de patitas en la calle tras el golpe de Estado más conocido como Revolución Soviética o Revolución de Octubre. La Marsellesa, el himno oficial a la sazón, aun adaptada para hacerla más proletaria, era sin embargo un himno de origen asquerosamente burgués, y eso, en aquellos tiempos de lucha de clases, dictadura del proletariado y marcha hacia el paraíso socialista, no podía ser. Así fue como la Internacional, tan pronto como en 1918, vino a reemplazar al brevísimo himno anterior. Y ahí va la letra oficial de la misma, primero en ruso:

Вставай, проклятьем заклеймённый,
Весь мир голодных и рабов!
Кипит наш разум возмущённый
И в смертный бой вести готов.
Весь мир насилья мы разрушим
До основанья, а затем
Мы наш, мы новый мир построим, —
Кто был ничем, тот станет всем.

Припев:
Это есть наш последний
И решительный бой;
С Интернационалом
Воспрянет род людской!

Никто не даст нам избавленья:
Ни бог, ни царь и ни герой.
Добъёмся мы освобожденья
Своею собственной рукой.
Чтоб свергнуть гнёт рукой умелой,
Отвоевать своё добро, —
Вздувайте горн и куйте смело,
Пока железо горячо!

Припев.

Лишь мы, работники всемирной
Великой армии труда,
Владеть землёй имеем право,
Но паразиты — никогда!
И если гром великий грянет
Над сворой псов и палачей, —
Для нас всё так же солнце станет
Сиять огнём своих лучей.

Припев.

Y en español, para solaz del buen número de izquierdistas que visitan esta página y a quienes seguro que les hará ilusión leerlo:

¡Arriba, parias de la Tierra!
¡En pie, famélica legión!
Atruena la razón en marcha:
es el fin de la opresión.
Del pasado hay que hacer añicos.
¡Legión esclava en pie a vencer!
El mundo va a cambiar de base.
Los nada de hoy todo han de ser.

Agrupémonos todos,
en la lucha final.
El género humano
es la internacional. (Bis)

Ni en dioses, reyes ni tribunos,
está el supremo salvador.
Nosotros mismos realicemos
el esfuerzo redentor.
Para hacer que el tirano caiga
y el mundo siervo liberar,
soplemos la potente fragua
que el hombre libre ha de forjar.

Agrupémonos todos,
en la lucha final.
El género humano
es la internacional. (Bis)

La ley nos burla y el Estado
oprime y sangra al productor;
nos da derechos irrisorios
no hay deberes del señor.
Basta ya de tutela odiosa,
que la igualdad ley ha de ser:
"No más deberes sin derechos,
ningún derecho sin deber".

Agrupémonos todos,
en la lucha final.
El género humano
es la Internacional. (Bis).


Ésta fue, pues, la letra del himno ruso desde 1918, y la de la Unión Soviética desde su creación en 1922. Pero, como observará cualquier lector avispado, en la letra de la canción obrera por excelencia no se cita a Rusia para nada, sino al género humano, la Tierra, ¿qué clase de himno nacional es ése?

Y, claro, al final, eso también chirrió, como veremos más adelante.

lunes, 10 de agosto de 2009

La Marsellesa

En febrero de 1917 estalló la Revolución en Rusia, Nicolás II abdicó en su hermano y, casi inmediatamente, se proclamó la república y, en lugar del Zar, apareció al frente del Estado un Gobierno Provisional encabezado por el príncipe Lvov (que es ese señor barbudísimo de la foto), al que más tarde sucedería Alexander Kerensky. En todo caso, ninguno de los dos era Zar, de manera que procedía cambiar el himno nacional, cuya brevísima letra estaba entonces bastante fuera de contexto.

Si habíamos visto que Alejandro I pilló directamente la música del "God save the King" inglés, los revolucionarios rusos de febrero, que debían estar pensando en que lo suyo era como la Francia de 1792, incluyendo no sólo la liberté, égalité et fraternité, sino también la amenaza por parte de los ejércitos austríaco y prusiano, decidieron adoptar como himno la Marsellesa, aunque no con la letra original de 1792, lo que no sé si a los franceses, sus aliados en la Primera Guerra Mundial, les hubiera gustado mucho, sino con una diferente que hizo llamarse el himno "La Marsellesa de los Trabajadores" y que era conocido desde 1875.

Отречемся от старого мира!
¡Renunciemos al viejo mundo!
Отряхнем его прах с наших ног!
¡Sacudamos sus cenizas de los pies!
Нам враждебны златые кумиры;
No queremos ídolos dorados,
Ненавистен нам царский чертог!
¡detestamos el palacio real!
Ему нужны для войска солдаты,
Necesita soldados para el ejército,
Подавайте ему сыновей;
entrégale a los hijos;
Ему нужны пиры и палаты,
necesita festines y camarines,
Подавай ему крови твоей:
entrégale tu sangre:

Припев (Estribillo):
Вставай, подымайся, рабочий народ!
¡Arriba, levanta, pueblo trabajador!
Вставай на врагов, брат голодный!
¡Contra el enemigo, que el hermano tiene hambre!
Вперед! Вперед!
¡Adelante! ¡Adelante!
Раздайся, крик мести народной!
¡Resuena, grito de la venganza del pueblo!

Богачи, кулаки жадной сворой
Los ricachones de la avara jauría
Расхищают тяжёлый твой труд,
roban tu duro trabajo,
Твоим потом жиреют обжоры;
con tu sudor engordan los glotones;
Твой последний кусок они рвут.
te arrancan tu último mendrugo.
Голодай, чтоб они пировали!
¡Ayuna para que ellos festejen!
Голодай, чтоб в игре биржевой
¡Ayuna, para que en la bolsa
Они совесть и честь продавали,
vendan el honor y la conciencia,
Чтоб ругались они над тобой!
para que te abronquen a ti!

Estribillo

Тебе отдых -- одна лишь могила!
¡Tu descanso sólo será la tumba!
Каждый день -- недоимку готовь;
Prepara cada día os atrasos;
Царь-вампир из тебя тянет жилы;
el zar vampiro extenúa tus fuerzas,
Царь-вампир пьёт народную кровь!
¡el zar vampiro bebe la sangre del pueblo!
Ему нужны для войска солдаты,
Necesita soldados para el ejército,
Подавайте ему сыновей;
entrégale a los hijos;
Ему нужны пиры и палаты,
necesita festines y camarines,
Подавай ему крови твоей:
entrégale tu sangre:

Estribillo

Не довольно ли вечного горя?
¿No está contento del sufrir eterno?
Встанем, братья, повсюду зараз!
¡Arriba, hermanos, por doquier y a un tiempo!
От Днепра и до Белого моря,
¡Desde el Dniéper hasta el Mar Blanco,
И Поволжье, и Дальний Кавказ!
y el Volga, y el lejano Cáucaso!
На воров, на собак - на богатых!
¡A por los ladrones, los perros, los ricos!
Да на злого вампира-царя!
¡Y a por el ruin zar vampiro!
Бей, губи их, злодеев проклятых!
¡Dales, pégales, a los malditos malhechores!
Засветись, лучшей жизни заря!
¡Brilla, mejor amanecer de mi vida!

Estribillo

И взойдёт за кровавой зарёю
Y saldrá tras la sangrienta alborada
Солнце правды и братства людей.
el sol de la verdad y hermandad de los hombres.
Купим мир мы последней борьбою,
Compremos la paz con la última lucha,
Купим кровью мы счастье детей.
compremos con sangre la felicidad de los niños.
И настанет година свободы,
Y vendrá el tiempo de la libertad,
Сгинет ложь, сгинет зло навсегда,
se perderán la mentira y el mal para siempre,
И сольются в едино народы
Y se unirán en un solo pueblo
В вольном царстве святого труда...
en el reino libre del sagrado trabajo...

Vamos, como Els Segadors, pero en obrero. Pero, claro, en 1917 pasaron muchas cosas, y el año no había hecho sino empezar.

viernes, 7 de agosto de 2009

Dios salve al Zar

Efectivamente, la cosa no podía durar mucho. En 1825, murió Alejandro I y fue sucedido por su hermano pequeño, Nicolás I. Nicolás I no era anglófilo (de hecho, al morir estaba en guerra con el Reino Unido), ni rarillo, ni mucho menos liberal, sino todo lo contrario, el campeón del Trono y el Altar, que intervino frecuentemente en Europa en contra de las revoluciones liberales y a favor de la legitimidad. En 1848 se lo curró a base de bien en Hungría y en Prusia, con todo éxito, y con respecto a España, aunque no llegó a reconocer a Carlos V, es evidente que su gobierno le caía mucho mejor que el de su sobrina, y así jamás reconoció como reina a doña Isabel, por lo que las relaciones diplomáticas entre Rusia y España no se reanudaron hasta 1856, cuando él ya estaba criando malvas.

En este contexto, y con lo liberalilla que era Inglaterra, tener la misma música en el himno le debía oler a cuerno quemado a Nicolás I. Así que, en 1833, harto de escucharlo durante un viaje oficial que hizo a Europa Central, dijo que basta y, ya con una nueva música, estableció como oficial el "Dios salve al Zar", cuya cortísima letra es la siguiente:

Боже, Царя храни!
Сильный, Державный,
Царствуй на славу, на славу нам!
Царствуй на страх врагам,
Царь православный!
Бо-о-оже, Царя храни!

Y, en castellano:

¡Dios salve al Zar!
Fuerte, Soberano,
¡Gobierna para nuestra gloria!
Gobierna para terror de los enemigos,
¡Zar Ortodoxo!
¡Dios salve al Zar!



Éste es el himno fetén legitimista ruso que todo monárquico tiene por suyo. Seis versos, fáciles de aprender, y a correr. Por ello, no es de extrañar que durase bastante, pero, andando el tiempo, llegó 1917 y las cosas se empezaron a torcer.

miércoles, 5 de agosto de 2009

Plegaria de los rusos

El resto del reinado de Catalina II, el reinado entero de Pablo I y buena parte del de Alejandro I fueron bastante moviditos, entre conspiraciones, guerras, peleas, follones y Napoleón dándose vueltecitas por Rusia, hasta que Alejandro I fue a París a devolverle la visita. Tras este período de intensa vida social, llegó una época de relativo sosiego, y Alejandro I debió pensar que era hora de volver al asuntillo del himno. Y es así como en 1816 ordenó que en sus actos oficiales se interpretara el himno conocido como Молитва русских, que en castellano es el título de esta entrada.

Alejandro I era un tío un poco rarillo, un anglófilo de la leche con tendencias liberalillas (pero sólo tendencias) y no demasiado aprecio, al parecer, por el arte ruso de la composición, así que la música la tomó directamente del himno británico, sin pagar a la SGAE británica ni nada parecido. Hoy día, los chicos de Teddy Bautista le hubieran denunciado ante el Tribunal de La Haya, por genocida, por lo menos, pero entonces no pasó nada de todo eso y el himno comenzó a interpretarse sin pagar cánones ni nada parecido. La letra, eso sí, la cambiaron a partir del segundo verso.

Боже, Царя храни!
¡Dios salve al Zar!
Славному долги дни
¡Dele al glorioso larga vida
Дай на земли!
en este mundo!
Гордых смирителю:
Al dominador de los orgullosos,
Слабых хранителю,
al protector de los débiles
Всех утешителю —
al consolador de todos,
Всё ниспошли!
concédelo todo.
Перводержавную
Русь Православную
Боже, храни!
Protege, Dios,
a la principal potencia,
a la Rusia ortodoxa

Царство ей стройное,
Su reino es recto,
В силе спокойное, —
tranquilo en la fuerza.
Всё ж недостойное,
Todo lo indigno
Прочь отжени!
apártanoslo

О, провидение,
¡Oh, Providencia,
Благословение
tu bendición
Нам ниспошли!
concédenos!
К благу стремление,
Aspiración al bien,
В счастье смирение,
humildad en la suerte,
В скорби терпение
paciencia en la desgracia
Дай на земли!
¡dánoslas hoy!

Muy bonito, pero eso de copiarse la música del himno británico no podía durar demasiado.

lunes, 3 de agosto de 2009

Resuena, trueno de la victoria

Estoy de vacaciones, y en vacaciones me doy la vuelta y miro al pasado. El verano anterior me dediqué a los relatos históricos acerca de los autores españoles de bitácoras (o así) sobre Rusia de tiempos pasados, como fueron Juan Valera, diplomático desocupadillo destinado en San Petersburgo, y Don Jaime de Borbón y Borbón-Parma, Príncipe de Asturias en funciones de oficial del ejército del Zar. Este año me voy a poner musical y me voy a dedicar a los himnos.

Los himnos nacionales son un típico fenómeno del nacionalismo liberal de los siglos XIX en adelante y, por ello, tienen una carga politiquilla indudable, porque cada cual tiene sus ideas propias sobre cómo debe ser su país y qué se debe pensar en él. El himno español es un poco anterior, de finales del siglo XVIII, y ha sobrevivido hasta hoy, salvo dos breves períodos en 1820-1823 y 1931-1939, gracias a la notable virtud de que no tiene letra y de que nadie ha sido capaz de atar completamente las notas musicales mondas y lirondas a una ideología política concreta. Pues, así y todo, tiene un rival "de izquierdas" que fue el vigente en esos dos períodos. Y es que los españoles, con tal de zurrarnos entre nosotros, somos capaces de todo.

Y no sólo los españoles, no. Si en algo tiene razón el artículo del señor Bayer del otro día, es en que en Rusia y en España tenemos cosas en común. Una de ellas es, o era, la división política llevada a las manos en forma de guerra civil; sin embargo, los himnos nacionales rusos (con una breve excepción que veremos más adelante) siempre han tenido letra, y así es como ha habido cambios en la simbología oficial rusa según el viento soplaba de un lado o de otro ¡Y mira que ha soplado!

De momento, el primer himno ruso no fue oficial. Podemos considerar como tal "¡Resuena, trueno de la victoria!". En diciembre de 1790, el general ruso Suvorov consiguió uno de los triunfos más espectaculares de las armas rusas, al tomar la fortaleza de Ismail durante la Segunda Guerra Ruso-Turca, donde, por cierto, destacó un general español, José de Ribas, al servicio ruso. La fortaleza de Ismail se consideraba inexpugnable, por lo que el alegrón ruso fue de aquella manera.



Ahí va la letra:

Гром победы, раздавайся!
(¡Resuena, trueno de la victoria!)
Веселися, храбрый Росс!
(¡Alégrate, valiente Rusia!)
Звучной славой украшайся.
(Adórnate con la sonora gloria)
Магомета ты потрёс!
(¡Has derribado a Mahoma!)

Como veis, en el siglo XVIII los autores de himnos nacionales no habían estudiado Educación para la Ciudadanía y no tenían el menor respeto por las opciones religiosas alternativas. Qué fascistas... :D

Припев (Estribillo):

Славься сим, Екатерина!
(¡Gloríate, Catalina!)
Славься, нежная к нам мать!
(¡Gloríate, tierna madre nuestra!)

Se refiere, obviamente, a la emperatriz del momento, Catalina II la Grande (en esta época ya era grande en todos los sentidos)

Воды быстрые Дуная
Las rápidas aguas del Danubio
Уж в руках теперь у нас;
ya están ahora en nuestras manos
Храбрость Россов почитая,
Al ver el valor de Rusia
Тавр под нами и Кавказ.
sométense Crimea y el Caúcaso.

Уж не могут орды Крыма
No pueden las hordas tártaras
Ныне рушить наш покой;
ahora turbar nuestra paz.
Гордость низится Селима,
Se hunde el orgullo de Selim
И бледнеет он с луной.
y está pálido como la Luna.

(Selim III, el sultán otomano que llevó las de perder en esta guerra.)

Стон Синая раздаётся,
Las trompetas del Sinaí retumban,
Днесь в подсолнечной везде,
se escuchan por todo el mundo,
Зависть и вражда мятется
la envidia y la enemistad
И терзается в себе.
se desgarran entre sí.

Мы ликуем славы звуки,
Nos alboroza el sonido de la gloria,
Чтоб враги могли узреть,
que los enemigos puedan ver
Что свои готовы руки
nuestras manos, preparadas
В край вселенной мы простреть.
a extenderse al universo.

Зри, премудрая царица!
¡Mira, sabia zarina!
Зри, великая жена!
¡Mira, gran mujer!
Что Твой взгляд, Твоя десница
Que tu mirada, tu diestra
Наш закон, душа одна.
sea nuestra ley, nuestra única alma.

Зри на блещущи соборы,
Mira las brillantes catedrales,
Зри на сей прекрасный строй;
mira este orden precioso;
Всех сердца Тобой и взоры
los corazones y miradas de todos
Оживляются одной.
se animan sólo por ti.

Tras este ejercicio, he llegado a una conclusión.

Que traducir versos más o menos literalmente es muy difícil. Dios mío, vaya bodrio. No es que no lo supiera, pero ahora lo corroboro. A ver qué tal se me da el siguiente himno...