miércoles, 6 de abril de 2011

A Dios rogando

A veces, las oraciones nocturnas en familia son fuente de malas noticias, como el otro día. Otras, son totalmente surrealistas, y eso suele ocurrir cuando la protagonista es Abi.

Como el otro día. Lo de siempre: cuatro oraciones "estándar", y luego cada uno reza en estilo libre. Acabamos, y a veces queda algo por decir.

- Ah, sí, - dijo Abi - y yo también quería pedir... esto... quería pedir... eh... eh...

- ¿Qué querías pedir?

- No sé... no me acuerdo... quería pedir... eh...

- ¿?

- ¡Ah, sí! ¡Ya lo sé! ¡Quería pedir a Dios que me diera más memoria!

Dios se lo debe estar pasando muy bien con nosotros, fijo.

2 comentarios:

  1. pues ya que me has dado pié, .... yo me lo paso como Dios.. ;-))) Fijo!

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  2. Ya lo creo. Como dios y dios son cuatro... :D

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