Esto de escribir se está poniendo muy peligroso. Lo malo de escribir es que hay gente a la que no le gusta lo que escribes, y las consecuencias, según sean las posibilidades del ofendido, pueden ser bastante desagradables. Como, además, gracias a internet, el número de escritores con audiencia ha aumentado exponencialmente, y la gente es capaz de perder la prudencia y la mesura en sus comentarios, la cosa se ha puesto tensa. Uno retuerce un poco algunos artículos del Código Penal y puede molestar bastante a quien se haya ido de la pluma.
En un país como Rusia, donde internet se ha vuelto sumamente popular, hay algunos ejemplos de venganzas tales. Veamos alguno.
Kovrov es una pequeña ciudad en la región de Vladímir, que tiene una bonita página local de internet, en la cual funciona un foro de debate como otros tantos como hay en este ancho mundo. Pues bien, en este pequeño mundillo se registró un usuario llamado "Myshkin", como el jugador de baloncesto, y se dedicó, en un diálogo con otros usuarios levantiscos, a poner como no digan dueñas al señor gobernador de la región de Vladímir, afirmando cosas como que era un "bestia capaz de todo" y que ha estado "aterrorizando a la región los diez últimos años". El señor gobernador, mosqueado, efectivamente fue capaz de todo con tal de descubrir al autor de tales aseveraciones, incluso de enviar la policía a convencer al administrador de kovrov.ru de la conveniencia de proporcionar toda la información sobre los usuarios. Parece que, sin autorización judicial ni nada parecido, el administrador de la página, por la cuenta que le traen y las malas pulgas que gasta el gobernador, ha decidido desvelar toda la información necesaria, confidencial o no.
Bueno, pues parece que el gobernador ha conseguido encontrar al presunto culpable en la persona de un empleado del ayuntamiento de Kovrov, que niega ser el tal "Myshkin", pero que igualmente tendrá que pasar por el juzgado y, caso de ser hallado culpable, parece que le espera un multazo de narices, cuando no un año de prisión. En ésas están ahora.
Antes de decir que en España no pasan esas cosas, parémonos a pensar. Resulta que me llegó de España un correo reciente diciendo que era una vergüenza que hubieran liberado a un tal De Juana, un tipo que se ve que estaba en huelga de hambre y había quedado algo desmejorado. Chateando con un español de los que residen en España, traté de hacerme una idea de qué estaba pasando por allí, que parece que no se habla de otra cosa, ni siquiera de fútbol. Corregidas las faltas de ortografía habituales de los chat, la cosa quedó así:
"¿Y qué ha hecho?", pregunté yo, que estaba algo desconectado de lo que se cocía por allí.
"Ha matado a veinticinco personas".
"¿Y por qué lo quieren liberar?"
"Es que ha cumplido condena, y le tocaba salir."
"Bueno, si ha cumplido condena, pues que lo saquen."
"No, que no se ha arrepentido. Es un asesino violento."
"Ya, pero, si ha cumplido condena, pues, lamentándolo mucho, habrá que sacarlo."
"No, que ha escrito unas cartas amenazadoras y le han condenado por amenazas a tres años. Le habían condenado a doce, pero se lo han bajado a tres. Y como llevaba dos años en prisión preventiva, sólo le quedaba uno y ya lo podían sacar. Y el Gobierno lo ha sacado."
"¡Leche! ¿Y qué decían esas cartas?"
"Bueno, no eran cartas. Eran unos artículos de opinión en Gara, el periódico de los terroristas."
"¿Y qué decían?"
"No lo sé. Yo no leo Gara."
"Entonces, si no has leído los artículos, y por los asesinatos ya había cumplido condena, ¿por qué estás tan enfadado?"
"Bueno, tú es que vives fuera, y no lo entiendes."
Como no había forma de sacar nada más de mi interlocutor, impulsivo, sí, mas poco informado, pasamos a otro tema. Pero, como no me quedé contento, me puse a buscar esos artículos de opinión, y efectivamente di con ellos aquí y aquí.
La verdad es que, lo que es agradables, pues no son, más bien todo lo contrario. Pero he estado buscando minuciosamente algo que pudiera entrar dentro del tipo de amenazas y no entiendo cómo a alguien le pueden caer tres años de cárcel por escribir cosas como éstas. A ver si resulta que el señor gobernador de Vladímir es menos susceptible que el señor juez que ha empapelado al tal De Juana.
En todo caso, por si acaso, en lugar de entradas guerreras como las que me gustan, me estoy pensando escribir sobre Paleontología o Historia Antigua. Al menos, los posibles ofendidos no te demandan.
Yo sólo te recordaré a aquel anónimo... ¿lo recuerdas?
ResponderEliminarA veces, hasta escribir en los blogs es peligroso...
besitosssss
jajaja, es cierto Esther...
ResponderEliminarBueno que quieres Alfor, en este mundo hay desde verdaderos locos, hasta gente demasiado susceptible...
Un beao
Tu "amigo" se explica muy mal y creo que tú no has entendido nada, pero en fin, sería muy largo de explicar. Sólo unos apuntes:
ResponderEliminarDetengámonos sólo en que ha sido condenado por los jueces e instituciones penitenciarias (verbigracia, el gobierno) lo ha soltado y ha cedido al chantaje de una (falsa, encima) huelga de hambre, cosa inédita.
Sólo recordar las huelgas de hambre de los GRAPO o del IRA -->0 concesiones.
El reglamento de instituciones penitenciarias establece claramente la huelga de hambre (y este asesino ni siquiera ha llevado a cabo una huelga de hambre como pretenden hacernos creer)como una COACCIÓN cuyo castigo es el aislamiento del recluso.
Ningún recluso está autorizado a convivir con su pareja, mantener relaciones sexuales con ella cuando le venga en gana, no ser sometidas a cacheo sus visitas ni llevar control sobre ellas, conceder entrevistas y ser fotografiado a su antojo, etc.
¿Más referencias? ElmundoTV y el telediario de Telemadrid ayer por la noche, donde habló uno de los cuidadores.
No es lo mismo que te amenace un niño que un tipo condenado por 25 asesinatos y sí, ya había escrito cartas anteriores desde la prisión proporcionando datos personales sobre funcionarios de prisiones y demás amenazados por ETA y brindando por los atentados (¿te suena apología del terrorismo?)
P.D: Lo del traidor no tiene nombre...
http://www.internetpolitica.com/archives/derechos_civiles/zapatero_en_199.php
Esther, ¿qué quieres que te diga? Pues que sí.
ResponderEliminarBAR, lo de la susceptibilidad tiene mal arreglo, ya lo creo.
Anónimo, ya veo que los ánimos están calentitos por mi patria, y que esto no le deja indiferente a nadie. Al menos, su mensaje ha tenido la virtud de hacerme escudriñar un poco por ahí qué es lo que ha pasado con este asunto, que quizá no comprenda bien del todo, efectivamente. He leído el enlace que proporciona, que le agradezco.
Creo que su análisis y el mío se centran en asuntos diferentes. Usted ve el problema desde un prisma político, y le reconcome lo de ceder a un chantaje. Yo lo veo desde un punto de vista jurídico (la cabra tira al monte) y me llevo las manos a la cabeza al leer los artículos y no comprender cómo escribir eso es punible con cárcel. Lo que pase después, incluido el chantaje, yo lo veo como consecuencia de esa primera chapuza de inventarse un delito con tal de que ese sujeto (que, desde luego, no lo quiero cerca) no saliera a la calle después de cumplir una pena bastante leve para lo que hizo, pero que fue la máxima que le podían poner.
Pero su mensje me da para más preguntas. Si había escrito cartas desde la prisión proporcionando datos personales sobre funcionarios de prisiones, ¿por qué no lo procesaron por colaboración con banda armada? Si brindaba por los atentados (no sé bien en qué términos; en principio, brindar por atentados es de pésimo gusto, pero no llega a delictivo), ¿por qué no lo procesan por apología del terrorismo?
Vamos: ¿por qué han tenido que ir a esos dos artículos, repelentes, pero nada más, para condenarlo por amenazas? ¿Dónde están las amenazas, en esos dos artículos?
Para mí que esto ha sido una concatenación interminable de chapuzas que nos ha dejado en ridículo.
1. El tío éste tiene que salir, pero si lo dejo salir tan pronto la gente se va a enfadar y perderé votos.
2. Con cualquier excusa (¡ya está! ¡los artículos!), lo proceso otra vez, convenzo al fiscal para que le pida un porrón de años y le mantenemos en prisión preventiva.
3. Ostras, se me ha enfadado el tipo éste y se me ha puesto en huelga de hambre. La verdad es que lo de los artículos no era para tanto, pero si lo dejo caer, perderé votos.
4. Los vascos éstos dicen que está en la cárcel por escribir lo que piensa, luego es un preso político. Y estoy perdiendo votos, ¿qué hago?
5. Bueno, hay que evitar que se me muera, o perderé aún más votos. Le daremos algún "privilegio" en la cárcel. A ver si hay suerte y el juez me lo absuelve y lo saco ya.
6. El juez éste ha decidido que ni de coña lo absuelve, que no quiere echar su carrera a perder ni que lo linchen desde la oposición, pero que le rebaja la pena lo justo para que lo pueda sacar yo. Y el tío éste sigue en huelga de hambre ligerita, pero huelga, y sale en los periódicos y todo eso, y yo sigo perdiendo votos.
7. Yo no llego así a las elecciones. Lo saco ya y espero que se pase el revuelo.
¿Le parece bien esta secuencia de acontecimientos, desde el punto de vista de ese a quien se refiere en la P.D.?
Lo malo es que una chapuza suele llevar a la siguiente para tratar de arreglar el desaguisado, y al final la cosa queda de tal manera que, hagas lo que hagas, todas tus opciones son malas.
En fin, usted parece saber más que yo sobre esto, así que le agradecería que me dijera cual es su opinión. Gracias por su comentario.
(Por cierto, póngase un nick, hombre, por sencillo que sea, o firme con cualquier cosa, que le vamos a confundir con otro anónimo que estuvo por aquí hace unos meses y armó algo de lío)