Lo venía prometiendo desde hace meses... puede que años. Pero ha llegado el momento de quitar de enmedio, o mejor, de la barra derecha, todas las bitácoras arruinadas por el abandono. Y de ir metiendo nuevas poco a poco, pero esto lo iré haciendo con calma. Bueno, espero que no con tanta calma como he tenido para limpiar éstas.
Ha caído de la barra The Carbuncho Times, que llevaba cuatro años sin actualizarse, lo cual es suficiente justificación para darlo por abandonado. Su autor continúa por Moscú, sí, y lo veo con mucha frecuencia, pero sus ocupaciones familares y académicas lo tienen lo suficientemente ajetreado para haber dejado el mundo de las bitácoras, así que una menos.
Otro que no sigue es Diarios rusos, bitácora de un profe de español en San Petersburgo que ya dejó San Petersburgo hace dos años, y con San Petersburgo dejó su bitácora. Era muy chula, el autor la escribía muy bien y me ha dado pena quitarla, pero las telarañas eran ya excesivas.
La siguiente víctima de la escoba es "El mundo mirado a través de diferentes cristales" (eso es lo que prometía, vamos). Al final, resultó que los cristales no eran tantos y la cosa no ascenció más que a cuatro entradas, como la bitácora de un becario cualquiera. Es una pena, porque el asturiano que lo escribía estaba en Irkutsk, que no es un lugar en el que abunden los españoles con ganas de escribir sus vivencias. De todas formas, se le veía concienzado a tope con la idea de difundir su bitácora, prueba de lo cual es que tradujo todas las entradas al inglés (pero, de leerlas, recomiendo encarecidamente hacerlo en español, mucho más que en inglés. si lo leéis en inglés entenderéis por qué). Quizá por eso, aún hoy, en el contador que tiene en la página sale que ha tenido más de once millones de visitantes. O es más conocido que Rihanna, o un fantasmón de siete suelas. El caso es que el entusiasmo se le apago enseguida, como a Usain Bolt corriendo una maratón.
Finalmente, el último tachón de esta tanda le corresponde a "Camino de perdición". Ya le tocaba. Por una parte, el autor, Boots, que incluso hoy a veces aún entra por aquí (¡un saludo, Boots!) ha dejado Moscú, de donde pensábamos que sólo conseguirían hacerle salir con aceite hirviendo, y ahora es un señor funcionario en Bruselas, aunque, lo que es la bitácora, la tenía apolillada desde bastante tiempo antes. Como no es probable que retome sus experiencias con el género bitacoril, procede aligerar la barra derecha.
También cae "Hora de Moscú". Su autor, Galo, argentino él, ha escrito dos entradas en los últimos dos años, y de la última hace más de siete meses. En estas circunstancias, a mí me parece claro que estamos ante una víctima de esa enfermedad, que podemos llamar "fatiga bloguera", y de la que nadie está a salvo, como es posible que comprobéis dentro de un tiempo, no sé cuánto, si continuáis pasando por aquí. Y, como no es cuestión de tener ahí bitácoras fosilizadas, toca desprenderse de ésta.
De momento, ésas son las cinco bitácoras que han abandonado, por defunción, la barra de enlaces. Pero creo que esto no ha sido todo. Por una parte, hay otras dos bitácoras que estaban marcadas en el primer proyecto de aligeramiento; por otra, me doy cuenta de que ahora debería rellenar la barra derecha con bitácoras jóvenes, frescas, lozanas y de actualización razonablemente frecuente. Sólo falta encontrarlas...
Saludos desde un seguidor en Alemania ;)
ResponderEliminarGleichfalls! :-)
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